Simancas asegura que la presidenta Aguirre utiliza "juego sucio" en su estrategia política

El líder de los socialistas madrileños, Rafael Simancas, arremetió ayer contra la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, a la que acusó de añadir el "juego sucio" a su estrategia política, que hasta la fecha ha estado centrada en "actitudes victimistas, populistas y de clientelismo". Explicó que la mandataria madrileña "juega sucio con maniobras inaceptables como la que prepara su partido" en Torrejón de Ardoz, donde esta formación está negociando con un tránsfuga socialista una eventual moción de censura que "vulnera el pacto antitransfuguismo".

"Juego sucio también es adjudicar sectariamente las licencias de televisión digital terrestre, hacer clientelismo entre los amigos, no defender la vigencia del pacto antitransfuguismo y falsear los datos en las listas de espera de la sanidad madrileña", según Simancas. Éste hizo estas declaraciones en un descanso del Comité Regional del Partido Socialista de Madrid (PSM).

El líder de los socialistas madrileños exigió a Aguirre un pronunciamiento "claro y público" desautorizando la moción de censura que se está preparando en Torrejón de Ardoz para descabalgar de la alcaldía a la socialista Trinidad Rollán.

Simancas recordó que el PSM se ha dirigido al secretario general del PP-Madrid, Francisco Granados, y a Cristina Cifuentes, miembro de la Ejecutiva regional de esta formación, para pedirles explicaciones al respecto. "En privado nos han dado garantías de que no se va a aceptar esa moción, pero mientras nos dicen estas palabras bonitas, los ediles del PP se siguen reuniendo con el tránsfuga", destacó Simancas.

El líder socialista también considera "juego sucio" el hecho de que el Gobierno regional (PP) convocara a los periodistas a una rueda de prensa para presentar a la responsable de la nueva Agencia para la Inmigración, Lucía Figar, mientras él intervenía en el reciente Debate del Estado de la Región o "falsear" y "mentir" sobre los datos de las listas de espera y la inversión territorial de Estado en Madrid para 2006.

El máximo responsable del PSM explicó que el Comité Regional se celebra en "un momento clave", después de pasar el ecuador de la legislatura, y afrontando ya la recta final del horizonte de 2007, cuando quedan apenas 20 meses para celebrar los comicios autonómicos y municipales. Explicó que, hasta la fecha, el PSM se ha "consolidado y fortalecido" como partido. "Ahora damos un paso más y pretendemos hacer una gran movilización para hacer realidad el cambio en Madrid", aseguró Simancas.

Se mostró convencido de que "el cambio iniciado en España por Zapatero se consolidará en Madrid", a partir de 2007. "Nuestro objetivo es ganar las elecciones contando con el 40% de los que nos votaron en 2003, más los que lo hicieron por Zapatero en 2004, y también con los abstencionistas que no nos apoyaron entonces y que comparten con nosotros valores progresistas y una valoración negativa sobre la gestión de Aguirre", agregó.

Estatuto catalán

La reunión de los dirigentes socialistas sirvió también para debatir sobre el proyecto de Estatuto recientemente aprobado por el Parlamento catalán, sobre el que expresaron opiniones dispares tanto el sector guerrista, que encabeza el diputado nacional José Acosta, como el de Izquierda Socialista. Simancas señaló que confía en que el Gobierno y las Cortes "pongan en su sitio" el Estatuto de Cataluña "sin que se vulnere la Constitución" pero mejorando "las condiciones de autogobierno de los catalanes".

Sin embargo, Simancas mostró su preocupación por algunos aspectos del proyecto del Estatuto que, en su opinión, "vulneran los principios de solidaridad y constitucionalidad". Así, aseguró que "negar al Estado" la capacidad para legislar en Cataluña sobre sanidad, educación, servicios sociales o infraestructuras "quiebra el principio de constitucionalidad", como también, añadió, se "rompe" el principio de solidaridad "al negar al Estado recaudar tributos e impuestos de una parte de su territorio".

"Estos extremos van más allá de los intereses de la sociedad catalana y del conjunto de los españoles", resaltó Simancas. Tras referirse al término nación que utiliza el Estatuto catalán, recordó que su uso ya fue debatido cuando se elaboró la Constitución.