Enric Gensana, el inexpugnable central del Barça de Helenio Herrera

El fútbol deja recuerdos imperecederos y modelos de conducta que trascienden a un equipo y a una época. En la que alcanzó su esplendor Enric Gensana, la televisión apenas empezaba a implantarse en España y los delanteros como Ku-bala y Di Stéfano se llevaban la fama. Por ello, doble fue el mérito de la pareja de centrales que alcanzó fama en el Barcelona y en la selección española formada por Joan Segarra y Enric Gensana. El carisma de Segarra, el gran capitán, permanece todavía fresco, e igualmente es venerada la figura de Gensana, fallecido el pasado martes a los 69 años.

Gensana era un defensa central que también podía actuar como medio volante defensivo. Nacido en Lleida en 1936, militó en el equipo de la Terra Ferma hasta que fue fichado por el Barça cuando apenas tenía 20 años. Muy fuerte físicamente y con una potencia extraordinaria en el juego aéreo, Gensana se distinguió por la clase y nobleza de su juego. Algunos ex compañeros recuerdan que tenían que insistirle para que se aplicase con mayor dureza y contundencia. No le hizo falta recurrir al juego sucio, como hacían la mayoría de defensas, para brillar y consolidarse como uno de los mejores centrales del mundo a finales de la década de los cincuenta y principios de los sesenta. Fue considerado el mejor defensa de las Copas de Europa en las temporadas 1959-1960 y 1960-1961.

Las lesiones mermaron una carrera excepcional en la que Gensana ganó con el Barça que dirigía Helenio Herrera dos Ligas, dos Copas de Feria y tres Copas de España. Permaneció en el Barça desde 1956 hasta 1963. Disputó 263 partidos y anotó 25 goles con la camiseta azulgrana. En la Liga debutó el 14 de mayo de 1956 en San Mamés ante el Athletic y su último partido liguero fue en Altabix ante el Elche el 22 de marzo de 1964. Fue 10 veces internacional absoluto y cuatro veces internacional B. Una lesión en un menisco le impidió disputar con la selección española el Mundial de 1962 y otra lesión provocó su prematuro adiós al Barça y al fútbol. Antes de ello jugó como cedido en el Osasuna y concluyó su carrera en el Condal, equipo filial del Barça de entonces.

Gensana, que había sido operado de la cadera y que durante mucho tiempo tuvo que ayudarse con muletas para andar, estaba vinculado a la Fundación de Veteranos del club azulgrana, a cuyo local en el Camp Nou acudía siempre que podía. Participaba en muchos actos relacionados con las peñas barcelonistas. Con una amabilidad y un talante excepcionales, atendía a cualquier aficionado, periodista o jugador que quisiera indagar sobre el fútbol de su época.

El sepelio se celebrará hoy a las 12.15 en el cementerio de Les Corts (Barcelona). Los jugadores del primer equipo lucirán un crespón negro en la camiseta con ocasión del partido que el Barça disputará mañana frente al Zaragoza.-