El PP da su apoyo al Reglamento de la Cámara en el que se contemplan cesantías a los diputados

El pasado mes de marzo el PP calificó la proposición de ley de reforma del Reglamento de la Cámara de "acuerdo del impulso de bolsillo", al estar incluido en el paquete del llamado impulso democrático en el que se contemplan cesantías temporales a los altos cargos y diputados hasta el tránsito a la vida laboral civil. El PP, que se opuso tan airadamente a estas medidas económicas, aprobó ayer, sin embargo, un nuevo Reglamento en el que se registra otra vez las mismas asignaciones para los parlamentarios. La reforma del texto fue aprobada por unanimidad.

Ningún grupo hizo mención en la tribuna al contenido de las cesantías incluidas en el artículo 8 de la ley del Reglamento de la Cámara, ni al chaparrón de críticas que el PP dirigió, hace meses, a PSOE, IU y PA por acordar asignaciones económicas temporales "al perder la condición de diputado por extinción del mandato o renuncia". Los portavoces de esos partidos no hicieron uso de las hemerotecas, aunque el portavoz del PP, Antonio Sanz, afirmó en marzo pasado que el pacto del Reglamento era "un episodio más del ejercicio absolutista del tripartido que tenemos en Andalucía" y acusó a IU y PA de dar "aplausos gratuitos" al PSOE a cambio del "acuerdo del impulso de bolsillo". Para que quedara clara su oposición, todos los diputados populares llegaron a firmar un escrito de renuncia en la Cámara a las cesantías.

El nuevo reglamento de la Cámara, aprobado ayer por unanimidad en lectura única, introduce mejoras en los mecanismos de control de la oposición sobre el Gobierno; obliga a las comparecencias de los responsables de las empresas públicas en la Cámara; permite mayor transparencia sobre la publicidad institucional; e introduce una serie de mejoras técnicas para aproximar el ritmo de los debates al pulso de la calle, como las preguntas de actualidad al presidente de la Junta.

Prácticamente el texto aprobado ayer es el mismo al que el PP se opuso hace seis meses, como recordó la portavoz de IU, Concha Caballero. La izquierdista, tras avisar de que le resulta muy difícil callarse, pidió a los populares que retirasen la "sarta" de acusaciones políticas que hicieron a los grupos que respaldaron el primer texto. En especial se dirigió a un ausente Javier Arenas, presidente regional del PP, por las reiteradas descalificaciones que dirigió a IU y PA respecto que se habían vendido al Partido Socialista. "Si retira aquellas insinuaciones, abriremos una nueva etapa", dijo Caballero.

Más favorable

El portavoz del PP, Jorge Ramos, le respondió con la mayor: "No sólo Arenas no tiene que retirar nada, sino que deberían felicitarle, porque gracias a él IU y PA cuenta hoy con un Reglamento mucho más favorable para sus grupos". Una vez cumplimentado el capítulo de agradecimientos (especialmente a los letrados), Ramos señaló que al PP no le ha importado quedarse solo si con ese aislamiento se ha conseguido mejorar la norma interna de la Cámara autonómica. Según él, la aportación de su grupo se evidencia en el hecho mismo de la retirada del anterior anteproyecto, que calificó como "rectificación justa", ya que, agregó, "al final se dieron cuenta que el Reglamento no podía hacerse en contra de nadie".

Antonia Moro, portavoz del PSOE, prefirió no entrar en este tipo de disquisiciones y evitó entrar en polémicas. En tono solemne calificó el nuevo Reglamento de "iniciativa trascendental" y puso el acento en su carácter innovador -"el más avanzado de todas las comunidades autónomas españolas"-. También subrayó que haya sido acordado entre todos, valor que prevalece por encima de haber tenido que retirar el anterior: "Era lógico, oportuno y necesario, porque así hemos logrado sumar voluntades".

El representante andalucista Ildefonso Dell'Olmo destacó el avance de las normas ya aprovecho para meter una cuña sobre la reforma del Estatuto de Autonomía y pedir "respeto" para la posición de su grupo.