Barberá deja en el aire el concurso internacional que convocó para la conexión urbana de Valencia con el mar

El diseño del sector urbanístico de El Grau, una superficie de más de 370.000 metros cuadrados que unirá Valencia con la fachada litoral, está en el aire. La alcaldesa, Rita Barberá, ha dejado en suspenso la resolución del concurso internacional que convocó a través de la empresa municipal Aumsa en octubre de 2004 con el fin de lograr un diseño "de vanguardia" para el remate del último tramo del cauce nuevo del Turia y su apertura al mar.

Según la alcaldesa, la definición urbanística de El Grau está pendiente de la planificación de la dársena interior del puerto de Valencia y su posible ampliación a terrenos portuarios después de las regatas de la Copa del América, una cuestión que debe negociar con el Gobierno en el Consorcio Valencia 2007. Sin embargo, fue la propia alcaldesa la que anunció iniciado el concurso una ampliación del ámbito para que las propuestas incluyeran el desarrollo de la posible "marina urbana" en terrenos de la Unión Naval de Levante.

Los socialistas exigen al PP que tome una decisión "por respeto" a los arquitectos

El concurso atrajo el año pasado la atención de grandes arquitectos internacionales y nacionales, que vieron una oportunidad de dejar su impronta sobre la zona en la que se desarrollará la Copa del América. La competición de vela fue también el argumento esgrimido por Barberá para rechazar las ofertas que ya existían para desarrollar El Grau y convocar un concurso que languidece desde que en febrero pasado se cerró el plazo para entregar los proyectos. Cuatro estudios de arquitectura -GMP International; Alejandro Zaera; Carlos Meri, y el grupo Idom- esperan su resolución. Aumsa puntuó las ofertas en mayo y situó a la cabeza el diseño de los arquitectos alemanes de GMP International, pero el equipo de gobierno del PP aplazó la decisión para elaborar un dictamen sobre la viabilidad de las propuestas. El pasado viernes Barberá vinculó la resolución del concurso a la planificación de la dársena del puerto.

El portavoz socialista, Rafael Rubio, destacó ayer que el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, ha descartado "por activa y por pasiva" la construcción de viviendas en el suelo portuario. Rubio insistió en que el concurso de El Grau debe resolverse "por respeto" a los participantes. De lo contrario, "nadie querrá venir a hacer concursos a esta ciudad porque no tiene garantías de que ni siquiera se fallen", dijo el portavoz socialista, quien recordó que el PP se comprometió a hacer un dictamen y a exponer las maquetas. Para los socialistas, el futuro concurso de ideas para la dársena no debe vincularse al PAI de El Grau.

Rubio aventuró en relación con el aplazamiento de la decisión posibles "intereses" con el fin de que "otros sean los que diseñen y ejecuten" el sector. La réplica del PP vino de la mano del concejal Miguel Domínguez, quien destacó que "la actuación urbanística más importante de los últimos años" tiene que "ser meditada concienzudamente". Domínguez consideró "lógico" que se analice la posibilidad de una marina urbana en el puerto y emplazó al Gobierno "a dejar claro cuál es su planteamiento para esta zona de Valencia".

Los socialistas también criticaron ayer la petición de 774 millones de euros de inversión en obras con vistas a la Copa del América realizada por Barberá al ministro de Economía, Pedro Solbes. El portavoz socialista repasó los presupuestos de 2002 a 2004 para concluir que la alcaldesa sólo pidió o logró del Gobierno del PP inversiones por 133 millones de euros. "O Barberá tenía poca ambición para la ciudad o su partido la ninguneaba", dijo Rubio. El gobierno del PP vincula la petición al compromiso del Gobierno de invertir 1.000 millones en la Copa del América.