Ion Fiz deja en manos de los abogados la solución del contencioso con su socia

El modisto vizcaíno Ion Fiz, uno de los nuevos valores de la costura con mayor proyección, ha vivido su más amarga pasarela en la 42ª edición de Cibeles, clausurada el jueves. Fiz no pudo mostrar su nueva colección debido a problemas con su socia capitalista, Cristina Ventura, que mantuvo las piezas retenidas. Tras tener que desfilar con modelos de temporadas anteriores, Fiz ha puesto en manos de sus abogados la resolución de este conflicto.

"He vivido días muy duros", reconocía ayer desde Madrid, en conversación telefónica, el modisto. "Ahora sólo quiero descansar. Me conectaré con el mundo sólo vía móvil", avisó. Para Fiz ha sido el final de una pesadilla que coronó el pasado jueves durante su previsto desfile en la pasarela Cibeles. En lugar de la nueva colección de primavera-verano, las modelos vistieron prendas de pasadas temporadas que el diseñador había conseguido reunir de amigos y clientes.

Al parecer, han sido diferencias por el contrato que le liga a su socia capitalista, Cristina Ventura, esposa del tenista Albert Costa, las que le llevaron a un enfrentamiento con ésta, que retuvo las prendas diseñadas por Fiz en el taller de Barcelona donde fueron confeccionadas. No han salido de ahí, como "revancha" por las diferencias surgidas entre ambos socios sobre cómo abordar proyectos futuros. En un intento por no consentir que se bloqueara su presencia en Cibeles, los últimos días el modisto acudió a amigos, a clientes de temporadas anteriores y les pidió en préstamo los modelos que tenían para montar su desfile a pesar de todo. En lugar ofrecer la colección primavera-verano, como el resto de sus colegas, Fiz repasó en Madrid su trayectoria como creador. "Agradezco a Cibeles todo su apoyo para que yo pudiera desfilar, aunque no contaba con la nueva colección", repite convencido el diseñador. "Para mí lo importante es mi trabajo y Cibeles, y ya está".

Aunque no quiere detallar lo sucedido y afirma rotundo que ahora el asunto "está en manos de otra gente [abogados]", Fiz explica que diferencias contractuales con su socia han provocado esta situación. "En resumen: no quiero vender mi patente. Es mía", estalla.

Ahora Fiz regresará al Bilbao que le vio nacer como modisto, que arropó sus primeras creaciones con la imagen de la muñeca Nancy como seña distintiva, y descansará de unos días tensos y dolorosos. "Son los abogados los que tienen que hablar ahora, los que se encargan del tema", dice.

Con todo, el diseñador vasco no ha perdido un ápice de su fe en su trabajo, en la fuerza de sus creaciones. "Creo mucho en lo que hago. Ya me dará mi colección y ya la mostraré", afirma.

Ion Fiz estudió diseño y moda en la academia Lanca de Bilbao. Presentó su primera colección en la pasarela Circuit en 2002 y colaboró con Pertegaz. Sus creaciones de anteriores temporadas se pueden ver en www.ionfiz.com.