"La situación es grave", dice Odriozola

España termina los Mundiales de Helsinki con dos medallas, las logradas por Paquillo Fernández y José Manuel Molina, plata y bronce, respectivamente, en los 20 kilómetros marcha. Tres metales menos de los previstos por José María Odriozola, presidente de la federación, que califica la situación de "grave".

"El fracaso del atletismo europeo dañará al atletismo mundial", explicó ayer Odriozola, "porque el 80% del dinero que genera el atletismo para pagar a las estrellas viene de los patrocinadores, las televisiones y las reuniones europeas".

El atletismo europeo recibe 22 millones de euros de la asociación de televisiones europeas, según Odriozola. Los mítines y reuniones generan otros 80. Y, ante los malos resultados de Helsinki, los grandes patrocinios corren peligro.

"Hay que establecer un nuevo marco de patrocinio", reflexionó Odriozola; "la federación internacional debería permitir a los atletas lucir la marca de sus patrocinadores durante los Mundiales. Eso ocurre en otros deportes y en nuestro caso los atraería por la gran exposición televisiva que significan unos Mundiales".

Preocupados por la situación, ya han comenzado los contactos entre los dirigentes de las más importantes federaciones europeas. El objetivo: lograr que los Europeos pasen a celebrarse cada dos años en vez de cada cuatro y los Mundiales al revés.

"El ciclo de los Mundiales cada dos años es repetitivo. Deberían celebrarse cada cuatro porque limita la progresión de los atletas", argumentó Odriozola, quien admite que la propuesta se ha encontrado con la resistencia de algunos países, "sobre todo africanos".

No es su única preocupación: "Es fundamental que el Ministerio de Educación sepa que éste es un problema grave, que afecta al desarrollo de los jóvenes, que cada día son más sedentarios. Además, la Unión Europea debería invertir más dinero en el deporte. En los campeonatos de cadetes y juveniles se mantiene un número estable de participantes desde hace lustros. Pero ya no vienen los mejores, los que tienen unas dotes especiales. Ahora compiten los aficionados al deporte".

Al debate se sumó ayer Sebastian Coe, uno de los mitos del mediofondo. "Hay que actuar ya", dijo el atleta en un artículo en The Daily Telegraph; "no se trata de invertir dinero, sino de conseguir entrenadores de nivel y comprender los sacrificios que hay que hacer para ser competitivos".