Sólo tres autonomías activaron el nivel 2 en lo que va de año
Castilla y León, Castilla-La Mancha y Andalucía recurrieron a la ayuda estatal
Dos autonomías habían declarado este año el nivel de alerta 2 por seis incendios (cinco veces Castilla y León, para cuatro siniestros en Zamora y uno en Salamanca, y una vez Andalucía, para Granada), según fuentes del Gobierno central. Castilla-La Mancha fue la tercera, al decretarlo el domingo por el incendio de Guadalajara. Más de 8.000 hectáreas habían ardido en los otros nueve siniestros que han alcanzado las 500 hectáreas de superficie quemada en 2005. Castilla y León y Cataluña, con cuatro cada una entre los 10 más graves, son las otras autonomías más castigadas por el fuego. Las causas del 40% de los incendios ocurridos cada año quedan sin aclararse.
Hasta el incendio que se ha cobrado la vida de 11 personas y ha arrasado más de 12.000 hectáreas en el noroeste de Guadalajara entre el sábado y ayer por la tarde, se habían producido en España otros seis incendios que superaron las 500 hectáreas de superficie quemada. Otros tres alcanzaron ese umbral con el que el Ministerio de Medio Ambiente distingue los fuegos más graves, según datos de Greenpeace.
Las autoridades Cataluña no solicitaron que la Administración central participara en la dirección y coordinación de las actuaciones de emergencia, como está previsto que ocurra una vez que un Gobierno autónomo decreta el nivel 2 de alerta por incendios.
El declarar ese tipo de alerta, sin embargo, no afecta a los medios que se pueden desplegar, según aseguraron un portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha y fuentes del Ministerio de Medio Ambiente.
Los incendios han arrasado en España una media de 48.614 hectáreas durante los últimos 10 años, según cálculos oficiales. Los motivos que los desencadenaron, en cambio, no se han aclarado en 8.046 siniestros, el 40% de los 20.424 siniestros declarados de media entre 1998 y 2003, según recoge el informe ¿Por qué ocurren los incendios en España? que la organización Adena / WWF publicó a principios de julio.
"Es imposible plantear medidas específicas de prevención con este grado de desconocimiento", advierten sus autores, Raquel Garzón y Félix Romeo.
Entre los incendios cuyas causas sí se han aclarado, los datos muestran que el factor humano es responsable en un 96% del total, según Adena. Las actividades agrícolas y ganaderas desencadenan buena parte de ellos: el 30% se debe a la quema de rastrojos y el 21% se había encendido para regenerar los pastos.
Las negligencias, que agrupan hogueras mal apagadas y descuidos de los fumadores, sobre todo, desatan el 13,4% de los fuegos. Raquel Garzón resalta la importancia de incidir en ellas. "Es una de las causas mejor conocidas y una realidad que se puede divulgar". Por ello, "es también relativamente más sencillo poner remedio". Una barbacoa mal apagada y situada junto a un rastrojo desencadenó la tragedia de Guadalajara, según los indicios.
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