Valencia mide a los desafiantes

Dos barcos, un neozelandés y otro francés, abren hoy la 32ª Copa del América, que arranca en Valencia en medio de una gran expectación: más de 500 periodistas de todo el mundo se han acreditado para cubrir las primeras regatas puntuables de la prueba, en la que competirán 12 equipos: tres italianos y un representante de España, Estados Unidos, Francia, Suecia, China, Alemania, Nueva Zelanda, Suráfrica y Suiza.

Valencia, designada sede del legendario trofeo en noviembre de 2003, afronta el reto de organizar una de las grandes competiciones mundiales, la más antigua de cuantas se celebran, que regresa a Europa después de 154 años. Doce equipos procedentes de 10 países representan a los cinco continentes, circunstancia que nunca se había producido en la historia de la copa, cuya próxima edición se disputa en 2007.

Valencia se ha convertido en la sede de la Copa del América más internacional. Países como China, Suráfrica o Alemania participan por primera vez. España, el país anfitrión, vuelve con su proyecto más ambicioso: 60 millones de euros de presupuesto. Pero a la cabeza de todos los desafiantes al vigente campeón, el suizo Alinghi, está el gigante estadounidense Oracle- BMW, el equipo del magnate del software Larry Ellison, que maneja un presupuesto de 200 millones de dólares.

Detrás del poderío económico, la mercadotecnia y el trabajo de las tripulaciones, se esconde el empeño de la organización en difundir entre el gran público los secretos de la Copa del América: varias pantallas gigantes instaladas en la playa retransmitirán las regatas,que también podrán seguirse a través de la web oficial. "Debemos ser capaces de transmitir la riqueza de un trofeo como éste", afirma Michel Bonnefous, presidente de la America?s Cup Management (ACM), la empresa que creó el Alinghi cuando conquistó la copa, hace dos años, en aguas de Auckland (Nueva Zelanda). Entonces, la prueba sufrió un vuelco: la ACM abrió un proceso de selección de la nueva sede. Ganó Valencia, designada en noviembre de 2003 frente a las otras finalistas: Lisboa, Marsella y Nápoles. Por el camino quedaron otras sólidas candidaturas, entre ellas algunas españolas, como Barcelona o Palma de Mallorca. Pero la oferta de Valencia, que pagó 90 millones de euros de canon, satisfizo a la organización.

Elegida la sede, la ACM -en la Copa del América, el último vencedor es quien organiza la siguiente edición- introdujo significativas novedades. Las principales son las regatas previas de la Copa Louis Vuitton, de la que saldrá el oponente al Alinghi, y el nuevo sistema de puntuación: por cada enfrentamiento ganado, un punto. Los puntos sumados en 2005 se multiplican por uno; en 2006 por dos y en 2007 por tres. Es decir, a medida que se acerca la competición, más valor tiene cada victoria. Finalizadas las regatas previas, el equipo que más puntos haya obtenido comenzará la Louis Vuitton, a partir del 18 de abril de 2007, con cuatro puntos; los tres siguientes con tres, del quinto al séptimo con dos y los cuatro últimos con uno. El Alinghi, aunque participa, queda excluido de la clasificación al tratarse del defensor de la copa.