Carod Rovira recurre a los tribunales contra el PP por amenazas

Además de exigir que se mantenga la unidad del archivo de Salamanca y protestar por el retorno a la Generalitat de los documentos que le fueron confiscados por el franquismo, algunos participantes en la manifestación organizada el sábado por el Ayuntamiento de Salamanca, en manos del PP, llevaban carteles con amenazas de muerte contra Josep Lluís Carod Rovira. El presidente de Esquerra Republicana anunció que hoy mismo emprenderá "acciones penales" contra los organizadores de la marcha por "tolerar" la presencia de tales mensajes amenazadores.

Entre los miles de personas que marcharon por las calles de Salamanca, convocadas por el Ayuntamiento de la ciudad y con el apoyo explícito del Partido Popular, no pocas lanzaron insultos contra el líder de Esquerra Republicana, a quien responsabilizan de la decisión del Gobierno central de devolver a la Generalitat los documentos que un día le fueron expoliados.

Pero algunos no se limitaron a los insultos. Hubo amenazas. La presencia en la manifestación de carteles con inscripciones como "Rovira al paredón" o letreros con la frase "Carod, ésta es tu caja" acompañados del dibujo de un féretro provocaron gran indignación en el líder de Esquerra Republicana, quien calificó de "matones de barrio" a quienes le amenazaron antes de clamar para "hacer callar a los fascistas" de una vez por todas y de acabar con su "impunidad".

Durante un parlamento en la fiesta que Esquerra celebró en Barcelona, Carod dijo: "Si éste es un Estado de derecho, tenemos que pasar a la ofensiva", y por ello anunció: "A partir de mañana [por hoy] usaremos la vía penal contra los que amenazan de muerte a los ciudadanos". "No tengo miedo", dijo Carod al público congregado en el parque de la Ciutadella "porque estáis vosotros y porque las amenazas no son contra mí, sino contra ERC, porque nuestro partido representa el cambio en Cataluña y en España".

Sobre los efectos políticos de la manifestación, la Comissió de la Dignitat, constituida en Cataluña para recuperar los papeles de Salamanca, expresó en un comunicado su convencimiento de que la protesta no cambiará la decisión del Gobierno español. "Ni esta ni ninguna otra operación de presión montada por la derecha nostálgica del franquismo cambiará la decisión del Gobierno español de hacer justicia en este caso y devolver los documentos expoliados".

La ministra de Cultura, Carmen Calvo, recordó que el retorno de los papeles a Cataluña no supone romper la unidad de archivo, pues los documentos sujetos a devolución apenas suponen el 3% del total del archivo histórico. Recordó también Calvo que estos documentos han sido solicitados incluso por el Partido Popular de Cataluña "desde hace 30 años".

A pesar de la crispación existente, la ministra no se amilanó por la demostración de fuerza del PP en las calles salmantinas y afirmó que el Archivo de la Guerra Civil "no es de Salamanca", sino del Estado. "No son los papeles de Salamanca o el archivo de Salamanca, son unos documentos de muchos españoles que se apilaron y se llevaron a esta ciudad porque era la capital del alzamiento" de 1936.

El Partido Popular, por su parte, calificó ayer de "éxito" la convocatoria del sábado y por boca de su portavoz en el Congreso, Eduardo Zaplana, pidió al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que "tome nota de la calle". Éste, lejos de tomar nota, señaló que al PP le pasa con las manifestaciones lo mismo que con el divorcio, "que no lo querían y ahora no paran".

Gaspar Llamazares, coordinador general de Izquierda Unida, dio la "bienvenida" al PP al ejercicio de manifestación, pero emplazó a sus militantes a no tener "miedo" y a acudir "a cara descubierta" a estas protestas. "No necesitan parapetarse detrás de las víctimas, detrás de un archivo o de las sotanas. Pueden perfectamente hacer manifestaciones a cara descubierta. No se lo vamos a prohibir", dijo, tras apuntar que el PP intentó "proscribir" ese derecho cuando la guerra en Irak y ahora este partido las convoca "a la desesperada".

Sobre el terreno, el presidente de la Junta de Castilla y León, JuanVicente Herrera, pidió al Gobierno que reconsidere su postura y consideró que con la manifestación se ha expresado la oposición al traslado del archivo. Herrera calificó de "firme y serena" la actitud de los manifestantes. A juicio del presidente, en la manifestación de Salamanca "muchas decenas de miles de españoles han dicho que no les parece bien que se juegue con el patrimonio y con la cultura común de todos".