Miles de preguntas parlamentarias esperan turno en las Cortes
El retraso en la publicación dificulta el control al Gobierno
Cerca de 3.000 preguntas parlamentarias que requieren contestación por escrito del Consell esperan turno para ser publicadas en el Boletín Oficial de las Cortes Valencianas (BOCV). A partir de su publicación, el Consell tiene 20 días para contestar las preguntas formuladas por los diputados de los diversos grupos, de manera que un retraso de su inclusión en las páginas del BOCV hace que pierdan actualidad y representa una merma en la labor de control al Gobierno que ejerce la oposición parlamentaria.
Es verdad que los diputados, especialmente los integrantes de los grupos de la oposición, hacen muchas preguntas parlamentarias: en lo que va de año la Mesa de las Cortes ha tramitado 3.207. Pero estas iniciativas, que forman parte de la esencial labor de control al Consell que ejercen los grupos de la oposición, pierden sentido -y actualidad- cuando su tramitación se retrasa durante meses, como sucede en la actualidad en las Cortes Valencianas.
El artículo 151 del Reglamento de la Cámara estipula que la contestación por escrito a las preguntas dirigidas al Consell deberá realizarse dentro de los 20 días siguientes a su publicación en el BOCV. Y ahí está el problema: la publicación en el diario oficial del Parlamento se retrasa durante meses. La última que ha tenido cabida en el BOCV, concretamente en el número 109, que lleva fecha del 3 de junio, fue firmada por Joan Antoni Oltra, diputado de Esquerra Unida-L'Entesa, el pasado 28 de febrero.
"Es una maniobra deliberada, porque hasta que no se publica no corren los plazos", señaló ayer Oltra, quien añadió: "Cuando vas a reclamar la respuesta a tu pregunta, te dicen: es que no se ha publicado". La pregunta de Oltra era la número 481/05 y la última que pasó ayer por la Mesa era la número 3.207 /05. Eso quiere decir que 2.726 preguntas están pendientes de publicación.
El retraso en la publicación de una pregunta representa una ventaja para el Consell, que tiene más tiempo para preparar la contestación, una posibilidad especialmente valiosa cuando se trata de asuntos espinosos. Porque, naturalmente, y más cuando las preguntas son comprometidas, el Consell las conoce sin necesidad de que sean publicadas en el BOCV: los integrantes de la Mesa que pertenecen al partido que sustenta al Gobierno las tienen y pueden transmitirlas.
Retraso en la contestación
Las contestaciones del Consell a las preguntas también se tienen que publicar en el boletín de las Cortes, que es el único medio para que los ciudadanos puedan tener conocimiento de ellas si no tienen acceso a los diputados, que es el caso de la mayoría. Pero también este proceso sufre enormes retrasos. Así, la última ocasión en que el BOCV publicó respuestas a preguntas parlamentarias fue el pasado mes de marzo. Entonces, como suele ser habitual, aparecieron muchas de ellas. Casi todas habían sido publicadas en un número del BOCV del mes de julio de 2004 y habían sido formuladas meses antes por los diputados. De esta manera, puede llegar a transcurrir más de un año desde que un diputado firma una pregunta hasta que la contestación aparece publicada en el diario oficial de las Cortes.
La calidad de la democracia se resiente con estos retrasos en las Cortes Valencianas, que contrastan con la rapidez con que se tramitan las preguntas en el Congreso de los Diputados. Sirva a modo de ejemplo que el Boletín Oficial del Congreso de los Diputados (BOCD) publicó en su número del día 3 de junio respuestas del Gobierno a preguntas parlamentarias que entraron en la Cámara a mediados del mes de mayo, mientras que preguntas registradas a finales de ese mes aparecieron publicadas el 2 de junio, fecha a partir de la cual el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero dispone de 20 días para contestar.
