Expo Zaragoza, en marcha
La Sociedad Estatal comienza los trabajos para la feria de 2008
Zaragoza se prepara ya para el 14 de junio de 2008, el día en que se inaugurará la Expo internacional a la que acudirán unos 7,5 millones de visitantes. Pero también se prepara para el 15 de septiembre, cuando, una vez clausurada, recupere ese espacio para oficinas y ocio. La Sociedad Estatal ExpoAgua 2008 se ocupa ya de todos los detalles de una feria que pretende vender Zaragoza, Aragón y España, y el respeto al agua como elemento esencial para la vida.
El 'día después' preocupa a los gestores tanto o más que la Expo. La idea es que el recinto tenga vida una vez concluida la feria
Roque Gistau es el presidente de la Sociedad Estatal ExpoAgua. Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, es un experto en este tema, ya que ha sido, entre otras cosas, presidente de Aguas Andinas y consejero delegado del Grupo Agbar en Madrid.
La Sociedad ExpoAgua 2008 está participada por el Estado (70%), el Ayuntamiento (15%) y el Gobierno de Aragón (15%). Cuenta con un capital social de 133 millones de euros, y su responsabilidad "es construir el continente de la Expo, y el contenido", es decir, las infraestructuras y la temática, explica Gistau.
La Sociedad está trabajando en desarrollar ambos campos, pero además está prestando una atención especial a un tercero: la calle. Los datos recogidos durante la Expo de Sevilla, en 1992, demuestran que la mayor parte de los visitantes pasaba más tiempo paseando por el reciento ferial que en los pabellones. Los responsables de Zaragoza están, así, pensando en la restauración, las sombras del recinto o los espectáculos de calle, casi tanto o más que en los contenidos de la feria. Zaragoza tendrá, además, una peculiaridad que no ha existido en expos anteriores: ExpoNoche, que ofrecerá espectáculos hasta las tres de la madrugada.
Los objetivos son tres, según explica Gistau: "Vender Zaragoza, Aragón y España en el mundo; defender el respeto al agua como elemento esencial para la vida, y convertir la Expo en un espacio para la cultura y el ocio".
La superficie del recinto es de 25 hectáreas, y participarán entre 72 y 100 países. La promoción internacional de la Expo ya ha empezado en una decena de países de los cinco continentes. Se esperan unos 7,5 millones de visitantes, y Zaragoza confía en su situación geográfica para atraer a miles de españoles: se encuentra entre el País Vasco, Cataluña, Madrid y la Comunidad Valenciana y, para 2008, ya existirá, previsiblemente, un AVE a Barcelona, además del de Madrid, que ya funciona.
La Sociedad Estatal está inmersa ahora en la definición de los contenidos y la construcción de los edificios, para lo cual cuenta con la ayuda del director de construcción de la Expo de Sevilla, Ginés Aparicio. En todo caso, "el día después interesa tanto como la propia Expo", explica Gistau. "Queremos que esta zona tenga vida cuando se termine". El recinto ferial se reconvertirá en un parque empresarial -con 80.000 metros cuadrados de oficinas- y de ocio.
Un elemento vital, pero vulnerable
El lema elegido para la Expo de Zaragoza es: "El agua y el desarrollo sostenible".Hay varios motivos para ello. Según explica Roque Gistau, el agua "es el elemento esencial para la vida, el desarrollo económico y la salud; es, además, un elemento finito y vulnerable; ha sido causa de guerras y crisis. El mensaje", continúa, "es que debemos promover una nueva cultura del agua y darnos cuenta de que es un elemento tanto o más crítico como los combustibles fósiles".
Zaragoza es una ciudad que, además, está muy ligada al agua porque cuenta con uno de los mayores ríos de España, el Ebro. La ciudad pretende aprovechar esta ocasión para desarrollar un plan de adecuación del río -el Plan del Ebro- que ordena 10 kilómetros de orillas urbanas. Son 25 actuaciones para acondicionar las riberas del Ebro y convertirlo en la calle principal de Zaragoza. Entre otras actuaciones, está prevista la construcción de cinco nuevos puentes.
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