Un informe del Banco de España insta a Cajasur a revisar sus cuentas y alerta del riesgo de inversiones

Un informe del Banco de España advierte al Consejo de Administración de Cajasur del elevado riesgo de varias de las inversiones aprobadas por los consejeros. El organismo supervisor cuestiona de tal modo la gestión del equipo directivo que preside el sacerdote Miguel Castillejo que ha recomendado de forma verbal su relevo antes del verano y ha exigido a la entidad que revise las cuentas de 2004. La salida de Castillejo estaba pactada por la Junta y el Obispado de Córdoba para finales de noviembre, pero tras el informe del Banco de España, ambas partes han acordado acelerar el proceso de renovación de la caja. Una situación que podría forzar hoy a Castillejo a anunciar su marcha tras 26 años en la presidencia de la entidad.

Cajasur ha convocado hoy a la asamblea general para, entre otras cosas, "el examen y aprobación, si procede, de la gestión del Consejo de Administración y de las cuentas anuales de 2004". Un miembro de la Asamblea explicó que, en la documentación sobre este punto del orden del día se hace una pequeña mención a un informe del Banco de España en el que se alerta de que la entidad "ha superado el límite de riesgos en determinadas inversiones".

El informe del Banco de España, finalizado en abril, es "muy crítico", según personas que han tenido acceso a él. El documento hace referencia a algunas decisiones del Consejo de Administración, en el que hay dos militantes del PP y uno de IU. Y también afecta al director general de la caja, Francisco Jurado. El órgano supervisor cuestiona varias iniciativas de la dirección, aprobadas por el Consejo, que han supuesto una concentración de riesgos muy elevada -es decir, que la probabilidad de no recuperar el dinero desembolsado es alta- en algunas inversiones a través de empresas participadas.

A modo de ejemplo de inversiones de alto riesgo, el Banco de España señala, según las fuentes consultadas proyectos inmobiliarios junto a Arenal 2000, propiedad del constructor Rafael Gómez. También se advierte sobre el riesgo de la importante cantidad de dinero comprometida en el Parque Joyero de Córdoba, el nuevo recinto al que se trasladará en junio gran parte de los fabricantes de alhajas de la ciudad.

Además, el Banco de España expresa su preocupación por el alto índice de morosidad (créditos a clientes que no se recuperan) de la caja que controla la Iglesia, muy por encima de la media de las entidades financieras nacionales. Y da de plazo hasta finales de junio a Cajasur para que "aclare la situación". Ese arreglo implica admitir que en las cuentas presentadas en 2004 (120 millones de beneficios, un 21% más que el año anterior), no se reservó suficiente dinero a cubrir las eventuales pérdidas de operaciones, que según el Banco de España, tienen "elevado nivel de riesgo".

Fuentes consultadas por este periódico indicaron que las recomendaciones del Banco de España para ajustar las cuentas son "especialmente severas". Unas recomendaciones que obligarán a la caja a aprobar dotaciones contra beneficios para cubrir ahora esos riesgos. En casos extremos, el Banco de España ha permitido repartir ese gasto en varios ejercicios.

Lo que sí ha expresado el Banco de España, de forma verbal, es la conveniencia de que Castillejo abandone la entidad antes del verano. Una recomendación, que según las fuentes consultadas, también ha extendido a parte del equipo directivo.

La asamblea que se celebra hoy puede ser el foro en el que Castillejo anuncie su marcha, toda vez que la Junta y el Obispado de Córdoba, tras el informe del Banco de España, están de acuerdo en acelerar el proceso de renovación de la entidad, cuya finalización estaba prevista para noviembre. "Está previsto y parece que lo anunciará, pero con Castillejo nunca se sabe", aseguró ayer un político cordobés que lo conoce bien. El sacerdote celebró el jueves una cena de despedida con representantes de Comisiones Obreras en la caja y ayer estaba previsto que lo hiciera con impositores.