La consola le gana al PC y entra en el salón para hacerse con el ocio electrónico

Cada segundo se venden ocho videojuegos en Estados Unidos. Un año más las cifras de negocio superan a las del año anterior según el informe de NPD Group presentado en la Exposición de Entretenimiento Electrónico (E3) de Los Ángeles, celebrada la pasada semana.

El volumen facturado por venta de software de entretenimiento, sin tener en cuenta las ventas de consolas (hardware), ascendió el pasado año a 7.300 millones de dólares sólo en Estados Unidos. "Esta industria se mantiene fuerte y en un crecimiento sostenido que la llevará a un crecimiento de dos dígitos en los próximos cinco años mientras entramos en el siguiente ciclo con los lanzamientos de las nuevas consolas. El futuro no puede ser más brillante", se felicita Doug Lowenstein, presidente de la Asociación de Software de Entretenimiento (ESA).

Por poner un ejemplo revelador, la nueva consola portátil Nintendo DS fue adquirida por más de un millón de jugadores cuando se lanzó en Estados Unidos en el pasado año. El exitoso iPod de Apple ha necesitado 19 meses para lo mismo.

Hechos como que el juego Halo 2 recaudara en el día del lanzamiento el triple (125 millones de dólares) que el estreno de la película más taquillera, Spider-Man 2, invitan un año más al optimismo y a cierta euforia. Pero este sector es oscilante y se mueve, como apunta Lowenstein, por los ciclos vitales de las consolas.

Entre la cresta de una ola y la siguiente, aparecen profundos valles que no todas las compañías son capaces de superar. Cuando la industria decide que se termina la vida útil de una generación y anuncia otra consola, los jugadores ahorran para comprar la nueva y, sobre todo, dejan de comprar juegos de la que pronto quedará obsoleta. Es lo que le está pasando a Sony por el anuncio de su Play Station 3 para dentro de un año.

En España, los datos de la Asociación de Distribuidores y Editores de Software de Entretenimiento (ADESE) para 2004 siguen la misma tendencia al alza de EE UU. De las estanterías salió el 10,8% más de videojuegos que en 2003, hasta alcanzar los 515 millones de euros. España es el cuarto país en ventas de Europa tras Reino Unido, Alemania y Francia, y la industria crea 5.000 puestos de trabajo.

En esta floreciente industria, cada vez menos infantil y más familiar, sin embargo, no todos ganan. De acuerdo con NPD, en 2004 se vendieron para el ordenador 7,5 millones de juegos menos, lo que representa 100 millones de dólares que se han dejado de ingresar, quedando las ventas totales en 1.100 millones.

En cambio, las ventas de juegos para consolas alcanzan los 5.200 millones de dólares con 160,7 millones de unidades vendidas. Los títulos para consolas portátiles, gracias al lanzamiento de Sony Play Station Portable y Nintendo DS, se disparan hasta la cifra récord de los 42,3 millones de unidades con una facturación de 1.000 millones de dólares.

El sesudo debate de hace cinco años, PC o consola, ha quedado resuelto. Consola, por supuesto. Los jugadores de consola crecen continuamente en número y edad, mientras que los del PC disminuyen, abandonan o se pasan a la consola.

Pero la cuestión no acaba en el pecé del estudio. El siguiente paso de la consola es colocarse en el salón de cada hogar para ser el auténtico centro de ocio digital y electrónico que actualmente, y por diferentes caminos, persiguen vorazmente desde Microsoft a Sony, HP, Philips Toshiba o Acer.