Fiesta total en Barcelona

Canaletas revivió ayer sus noches mágicas. Miles de aficionados azulgrana se echaron a las calles. No sólo allí, en la Rambla, en el corazón de la ciudad.

El estallido de alegría, los fuegos artificiales, los cláxons y las riadas de gente se dejaron notar por toda la ciudad. Miles y miles de aficionados festejaron el título con todo tipo de cánticos.

Hacía seis años que la afición azulgrana no podía festejar ningún título, desde que en 1999 consiguió la Liga, con el equipo que entonces dirigía el holandés Louis Van Gaal. Hoy proseguirán los festejos.

A partir de las seis de la tarde, un autocar descapotable en el que viajarán los jugadores del equipo barcelonista desfilará por las calles más céntricas de Barcelona, que estarán abarrotadas de seguidores. En el Camp Nou, donde se espera un lleno casi absoluto se festejará el título alcanzado.

Esta vez no se acudirá a la plaza Sant Jaume, como solía ser habitual. El cava había corrido ya a raudales en los vestuarios del Ciutat de València.

El caso es que a las provisiones que llevó consigo la expedición del Barcelona se añadieron las botellas que le preparó el Levante. Un empleado del club granota se encargó de meter unas cajas de cava en la nevera del vestuario visitante, un detalle que agradeció la directiva del Barcelona.

Entre los muchos aficionados del Barcelona que presenciaron el partido desde la grada, pudo verse a algunos tan famosos como los cantantes Manolo Escobar, Josep Carreras y Joan Manuel Serrat, así como el ex presidente barcelonista Joan Gaspart, uno de los mayores hinchas, quien ocupó con discreción localidades bajas de tribuna.

El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, analizó la clave del éxito: "Laporta y Rijkaard han sido fundamentales. Eso y que el equipo ha recobrado su personalidad, la línea de siempre, dignidad, juego limpio".

En su casa de Sant Antoni de Calonge (Girona) y acompañado de la familia, el vicepresidente deportivo del Barça, Sandro Rosell, expresó su alegría: "Estaba muy enervioso, pero cuando Eto'o ha marcado he explotado de júbilo".

Rosell no fue al Ciutat de Valencia, por eso, tras afirmar que después de la copa de cava que se tomaría para celebrar el título, explicó: "No es por un distanciamiento con Laporta. No voy porque había abandonado un poco a la familia. No tiene más interpretación. Pero ahora sólo hay que pensar en festejarlo. Y dedicarlo hasta el último socio, porque sus ánimos también cuentan".