¡A la carga!

Verdadera estrategia con ciertas dosis de historia europea, eso es lo que la compañía alemana CDV Software Entertainment ofrece a todo aquel que se haga con Cossacks 2: Napoleonic Wars, la continuación del juego del mismo título.

Una de las principales bazas para que valga la pena comprar esta segunda entrega son los cambios gráficos y la fidelidad histórica. Tanto el modo campaña como el Battle for Europe, ofrecen al jugador gran cantidad de documentación sobre el periodo histórico de las guerras napoleónicas del siglo XIX.

Seis son los países que se pueden elegir (Francia, Egipto, Rusia, Prusia, Austria y Reino Unido), como seis son los puntos de vista bajo los que se presenta este periodo de la historia.

Para los que piensan que el ocio electrónico no es más que una pérdida de tiempo, este juego puede hacerles cambiar de opinión y acercarles de una manera amena a la historia.

Cossacks 2 se enmarca dentro de la estrategia en tiempo real, es decir las órdenes que se dan a las tropas son interpretadas inmediatamente por el programa y se pueden observar en pantalla. Se deja a un lado la estrategia por turnos, en la que se debe esperar a que el contrincante mueva sus ejércitos para ver el resultado completo de la maniobra.

Como en el clásico juego de estrategia, en éste se tiene una vista isométrica del campo de batalla, es decir, la visión será un poco elevada para abarcar mejor toda la acción. Todas las representaciones son en esta ocasión en tres dimensiones, gracias al renovado motor gráfico que permite ver un conjunto nuevo y de una gran riqueza, aunque algunas animaciones son un tanto simples, sobre todo cuando un grupo numeroso se enfrenta a otro y los cuerpos se transforman en dos manchas del color.

El nombrado anteriormente Battle for Europe, es uno de los modos de juego incorporados en esta nueva edición y ha resultado un gran acierto. Parecido al conocido juego de mesa Risk, los jugadores convertidos en comandantes tienen como objetivo conquistar todos los territorios posibles. Cossacks 2 no es un alarde de técnica, pero es, sin duda, el retorno a la estrategia clásica con verdadera sustancia con la que jugar.