Los fotógrafos atrapan la vida de un año
Un rompecabezas no necesita de todas sus piezas para revelar la esencia de su imagen. Tampoco un año precisa de todo sus fragmentos. A través de 115 imágenes se puede obtener una idea clara de los acontecimientos que han marcado la actualidad. La realidad es, no obstante, poliédrica, como la mirada de los 62 fotógrafos valencianos participantes en la exposición Fragments d'un any. 2004, que se inaugura hoy en el Museo de la Ciudad de Valencia.
En algunos casos, la estética prima sobre los hechos; en otros, son los hechos los que constituyen el acontecimiento estético. Pero en cualquier caso, todos muestran los fragmentos de una realidad captada a lo largo del pasado año: desde una espesa niebla que envuelve hasta hacer casi invisible el cemento blanco de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, hasta la Valencia vacía y gris sobre la que se precipita una estudiante musulmana envuelta en un velo, pasando por el jolgorio multitudinario y chillón de los aficionados del Valencia por unos éxitos deportivos históricos que, vistos hoy, casi provocan melancolía.
La Unió de Periodistes organiza una muestra que repasa 2004 a través de 115 imágenes
Recorrer la exposición organizada por la Unió de Periodistes Valencians (UPV), con la colaboración del Ayuntamiento de Valencia, es como visitar un año condensado, en el que el fuego se comió el verde de la Calderona; algunos contenedores portuarios, amontonados y abandonados, adoptaron formas del Rauschenberg que exhibe el IVAM, devorada ya La Punta; los perfiles de Palop y Cañizares entrenando evocan una imagen casi bucólica y probablemente muy engañosa; una niña adormecida y hastiada no parece compartir el talante de Zapatero mitinero; una joven lanza sus brazos al mundo en un baile diferente al que se dirigen con cotidianos andares los participantes semidesnudos del orgullo gay; Una vela apunta al cielo y al 2007; Camps habla bajo la imagen de un borroso pero enorme Zaplana; el gesto duro de Aznar se vislumbra entre las filas de soldados a los que pasa revista; un capirote rojo encabeza la procesión de semana santa que también llega a la cárcel; Rafa Benítez también llora.
Hay muchas más imágenes que se podrán ver hasta junio. La exposición es el arranque de la semana de los Premis Llibertat d'Expressió que concede la UPV y han recaído en Pilar Manjón y los periodistas Giuliana Sgrena (la italiana secuestrada en Irack) y el cubano Raúl Rivero. La presidenta de la Unió, Amparo Bou, el coordinador de la exposición (más de 50.000 visitantes el pasado años en la Fnac), Juan Carlos Cárdenas, y la concejal de Cultura, María José Alcón, presentaron ayer la muestra.
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