Un incendio destruye por completo una empresa de siliconas de Zumaia en la que trabajan 60 personas

Un incendio destruyó la madrugada de ayer la empresa Siliconas Silam, ubicada en el polígono industrial José María Korta de Zumaia y dedicada a la transformación de siliconas para cables, mangueras y tubos. El fuego comenzó minutos después de las 3.00 en el horno industrial y luego se propagó por el resto de la planta, según precisaron dos trabajadores que se encontraban en las instalaciones en ese momento y que salieron ilesos.

En un primer momento acudieron al siniestro efectivos del parque de bomberos de Zarautz, quienes, al comprobar la gravedad del incendio, pidieron refuerzos a sus compañeros de Azpeitia e Irún. Los 15 bomberos desplazados al lugar no pudieron evitar que las llamas acabaran con las líneas de materia prima, producción y producto acabado de la empresa, constituida en 1984 y en la que, según indicó la patronal Adegi, trabajan unas 60 personas. La zona de oficinas también sufrió graves daños, aunque fue posible salvar algunos documentos. La mayor parte de la fachada (un muro se desplomó) y la estructura del pabellón resistieron.

El incendio quedó controlado sobre las 7.00 y extinguido tres horas después, según informaron los bomberos. Las empresas contiguas a Silam: Emsa y Elkor, se libraron de las llamas, pero no del humo. Además, las placas de hormigón prefabricadas que separan las naves sufrieron dilataciones por la elevada temperatura.

El fuego provocó una nube de humo tóxico que llevó a la Policía Municipal de Zumaia a recomendar a los vecinos de tres caseríos próximos que permanecieran con las puertas y ventanas cerradas. Sin embargo, no fue preciso adoptar medida alguna más, ya que la brisa dispersó la nube sin generar problemas, según indicó el técnico de Salud del Gobierno vasco que se trasladó hasta el lugar.

En lo que va de año, el fuego ha generado graves destrozos en al menos otras cinco empresas vascas. En marzo, las llamas arrasaron en Astigarraga la planta de Colas Otaduy, que decidió cerrar sus puertas. Ese mismo mes, sendos incendios destruyeron una fábrica de muebles en Muskiz y un secadero de jamones y una firma de aluminio en Mungia. El pasado domingo, un incendio dañó un pabellón de la compañía ITP, en Barakaldo, que fabrica motores de aviación.