"No me frustraría no ganar un Mundial"

Sete Gibernau (Barcelona, 32 años) se ha convertido en el único piloto capaz de cuestionar la hegemonía de Valentino Rossi en MotoGP. El año pasado concluyó subcampeón, pero esta temporada cuenta con el apoyo total de la fábrica Honda y parece en condiciones de convertirse en campeón mundial. Sin embargo, su primera batalla con Rossi, en Jerez fue épica y concluyó con un adelantamiento polémico del italiano que desplazó a Gibernau en la última curva. Sete recibió un golpe en su hombro izquierdo que le molestará todavía cuando hoy (14.00, TVE1) inicie la segunda carrera del Mundial. Ayer se cayó en los entrenamientos libres y tuvo que ser atendido e infiltrado para la clasificación: hizo el segundo mejor tiempo, por detrás de Alex Barros y por delante de Carlos Checa. Rossi saldrá cuarto, en la segunda línea. El español volverá hoy a infiltrarse para poder correr.

"Siempre veo la botella medio llena y me quedo con todo lo bueno que hice en Jerez"

"¿Rossi? Nos jugamos el físico, y el respeto no puede perderse. Duele que alguien lo pierda"

Pregunta. ¿ Estará a tope mañana para la carrera?

Respuesta. No. Debo ser fuerte, porque sé que voy a sufrir. Veo imposible aguantar el ritmo durante toda la carrera. Habíamos dado un gran paso, pero la caída de esta mañana [por ayer] me ha perjudicado. Salir en la primera línea no refleja mi estado actual. Pero saldré a ganar.

P. ¿Le molestó mucho que Rossi se burlara en Jerez cuando usted se quejaba de dolor?

R. No me sentó bien. Es una lástima por el deporte y por la imagen que se dio. Había muchos sentimientos en juego y yo realizaba un gran esfuerzo para controlar mis emociones. El respeto no puede perderse. Y duele cuando alguien lo pierde. En la pista nos estamos jugando mucho más que un resultado, nos jugamos nuestro físico y es mucho más serio que todo esto.

P. El año pasado Honda le daba las mejoras con cuentagotas. ¿Cuenta esta vez con el mejor material de fábrica?

R. Hemos dado un paso adelante muy grande. Tenemos el mejor material tanto a nivel de moto como de neumáticos.

P. ¿Le ofrecieron incluso entrar en el equipo oficial Honda?

R. Sí. Fue una de las posibilidades que se barajó. Pero hubo un respeto exquisito por todas las partes y llegamos a la solución más idónea.

P. El año pasado ya demostró que podía ganar a Rossi y estuvo cerca del título mundial. ¿Es éste su objetivo de esta temporada?

R. Lo más importante es luchar contra uno mismo para mejorar constantemente. Siempre ha sido mi actitud y me ha funcionado. Sé que aún no he llegado al máximo y eso es lo que más me motiva. Si logro dar lo mejor de mí no dependeré de nadie más para conseguir el Mundial.

P. Con cuatro títulos consecutivos, Rossi es el gran referente de MotoGP. ¿Cómo soporta eso un piloto de su nivel?

R. Siendo feliz por lo que soy y lo que he sido. Conozco mi situación, sé las circunstancias que me han llevado aquí y cómo he llegado. Y eso puedo controlarlo. Lo de los demás no. Me equivocaría si lo intentara, porque perdería mucha energía. Y ésa la quiero toda para mí.

P. ¿Y cómo llegó hasta aquí?

R. Con ilusión y con respeto, con el espíritu de mejorar y con la tranquilidad de comprender por qué en un momento determinado no obtenía buenos resultados y ahora, en cambio, sí. Voy en moto igual que siempre, pero ahora estoy luchando en cada carrera para ser campeón mundial y antes no.

P. ¿Ha pasado por su cabeza que sin Rossi probablemente tendría ya algún título mundial?

R. No. Vivo en esta época y me gusta, porque he comprobado que utilizando bien todas mis posibilidades puedo ser campeón. En otras etapas los rivales habrían sido distintos, pero igual de buenos.

P. ¿Qué sentimiento tuvo cuando llegó a la meta en Jerez, después de que Rossi le tocara y le obligara a salir de la pista?

R. Soy muy positivo. Me guardé mis sentimientos. No quería que un momento puntual de rabia y de indignación tapara el buen trabajo que hice durante toda la carrera. Siempre veo la botella medio llena. En Jerez hicimos un pleno absoluto y me quedo con las cosas buenas que nos ocurrieron.

P. ¿Sabe que hay mucha gente que esperaba una reacción más visceral por su parte?

R. Claro que lo sé. Pero si la hubiera tenido, habría otras personas que la cuestionarían. Siempre hay diversidad de opiniones. Pero doy gracias a Dios porque mi educación es la que he recibido por parte de mi familia y porque mis 32 años me dan mucha experiencia. Igual un año antes no reacciono de la misma forma. Actué así, porque al final soy una persona que respeto mucho a los demás. Y, vistas las consecuencias, estoy convencido de que hice lo que debía.

P. ¿Ahora mismo, se siente respetado por Rossi?

R. Eso no puedo controlarlo. Y, por tanto, no le dedicaré ni un segundo de mi energía ni de mi tiempo. No puedo cambiarlo.

P. ¿Prefería callarse y emplazar a su rival en la pista?

R. En la pista hay que ganar y para eso no hacen falta revanchas, ni otras historias. Sólo hay que hacer bien nuestro trabajo.

P. ¿Cree que este año tiene mejor moto que la Yamaha de Rossi?

R. No. Hay aspectos positivos y otros negativos. Hay áreas que debemos mejorar. Y ellos también. Pero es evidente que si tienes capacidad para ganar es porque tu material te lo permite. Tú solo no lo conseguirías.

P. ¿Qué ha cambiado en relación al año pasado?

R. Algunas cosas. Honda y Yamaha están más cerca a nivel competitivo. Hemos hecho una gran pretemporada. Y todo eso nos ha hecho más fuertes. Hemos mejorado, eso está claro.

P. ¿Se siente más fuerte psicológicamente cada temporada?

R. Cada temporada y cada carrera. Aprendo mucho de cada circunstancia. Me gusta pensar que no he llegado a mi límite. Y eso me ayuda a crecer.

P. ¿Conociendo como conoce a Rossi, creía que podía tener unas reacciones tan viscerales hacia usted?

R. Son cosas que se me escapan. Y mis sentimientos me los guardo. No le doy muchas vueltas.

P. ¿No cree que está intentando ponerle bajo presión, a través de sus actitudes beligerantes?

R. Insisto, no me afecta. Todo esto me ha llegado con un grado de experiencia personal y deportiva muy elevado y no me preocupa.

P. ¿Cómo se definiría personalmente y como piloto?

R. Soy una persona feliz que aprecia lo que tiene, lo que ha hecho y lo que le rodea. Algunas de estas cosas no son mérito mío: como cuando abres los ojos y naces en una familia concreta. Es la que te toca. Algunos ni siquiera pueden sobrevivir. Yo he intentado aprovechar todo lo que mi familia me ha ofrecido. Y he disfrutado de la vida, porque mi mejor sueño no es mi vida deportiva sino la global.

P. Siempre ha vivido entre motos. Su abuelo, Paco Bultó, fue el fundador de Bultaco. Ahora usted es uno de los mejores pilotos del mundo. ¿Se siente un privilegiado?

R. No especialmente. Antes de todo esto yo era igual de feliz. No había resultados deportivos, pero había otros valores.

P. ¿Qué cree que piensa la gente de usted? ¿Le preocupa su imagen pública?

R. Conque quienes hablen de mí, en positivo o en negativo, lo hagan con respeto ya me doy por satisfecho. Soy una persona pública y acepto los comentarios. Pero si se pierde el respeto no queda nada.

P. Cuando se está en una situación social como la suya, corre el peligro de instalarse en una nube y perder de vista la realidad. ¿Le ha ocurrido eso alguna vez?

R. Intento que no me ocurra. Suelo adaptarme a cada situación. He pasado por muchas etapas: estudiante, comenzar a correr en Europa, llegar al Mundial, hacerlo mal y bien. Lo bueno de todo eso es que, al final, el ganador lo es porque se lo merece.

P. ¿Cómo le sentaría acabar su carrera sin un título mundial?

R. Es mi sueño, no mi obsesión. No me frustraría por ello. No sería justo. Puedes tener un momento de rabia. Pero no me gustaría quedarme con una sensación de rencor por no haber ganado el título. Es mi objetivo y lo daré todo para lograrlo. Sin embargo, duermo siempre muy tranquilo.