Un divo olvidado

El paso del tiempo entierra en el olvido a muchas voces que triunfaron en el mundo de la ópera. Hace 60 años, el tenor catalán Pau Civil (Teià, 1899-Barcelona, 1987) arrollaba en los principales teatros italianos y españoles con un canto directo y seguro, rematado con esplendorosos agudos; hoy es un ilustre desconocido para el gran público. Para rescatarle del olvido, el sello discográfico Aria Recording ha recuperado algunas de sus históricas grabaciones con un repertorio de arias y fragmentos de ópera y zarzuela grabados entre 1929 y 1952.

La brillantez vocal de Pau Civil -un intérprete fogoso que se ganó el favor de compositores veristas como Pietro Mascagni, Umberto Giordano, Ricardo Zandonai e Italo Montemezzi, que le confiaron sus obras- queda bien retratada en un disco de generosa duración que incluye en la parcela operística títulos como Carmen, de Bizet; Mefistofele, de Boito; La Wally, de Catalani; Lucrecia Borgia, de Donizetti; Andrea Chenier y Fedora, de Giordano; Fausto, de Gounod, y Manon Lescaut y La bohème, de Puccini.

Civil debutó en 1925 con Rigoletto en el casino de El Masnou e inició inmeditamante una gira por España en la compañía de la soprano Mercedes Capsir. Tras debutar en Italia en 1928, regresó a Barcelona y, aconsejado por el mítico tenor Francesc Viñas, preparó a fondo en papel wagneriano de Lohengrin, con el que alcanzaría el éxito en teatros españoles e italianos. En 1930 se casó en Milán, donde fijó su residencia hasta el colapso bélico de 1943, que le llevó a establecerse, ya definitivamente, en Barcelona.

Las décadas de 1930 y 1940 fueron la época dorada de Civil, con debuts sonados en los principales coliseos líricos de Italia: Venecia, Bolonia, Génova, Nápoles, Florencia, Roma y la mítica Scala de Milán, donde estrenó en 1937 Lucrezia, de Respighi. En el Liceo de Barcelona debutó en 1933 y actúo hasta la temporada 1952-1953 participando en los estrenos de Soledad, de Joan Manen, y Canigó, de Antoni Massana. Tras su retirada como cantante, colaboró con el Liceo como director de escena hasta 1962 y fue profesor de canto en el Conservatorio del Liceo desde 1966 hasta 1984.

La ópera italiana fue el núcleo de su amplio repertorio, en el que figuraron también obras de Wagner y Mussorgski; destacó especialmente en el repertorio verista y fue escogido por Mascagni para interpretar el papel de Turiddu bajo su dirección con motivo del cincuentenario de Cavalleria rusticana. El disco muestra también su dedicación a la zarzuela, con romanzas y dúos de Luisa Fernanda, de Federico Moreno Torroba, y Doña Francisquita, de Amadeu Vives.

Con este lanzamiento, Aria Recording alcanza la cifra de 31 discos en su colección Les Nostres Veus Retrobades, iniciada en 1997 por su responsable artístico, Frances Llorens. "La colección nació con el objetivo de descubrir a las nuevas generaciones de aficionados a la ópera las voces de auténticos divos del pasado hoy injustamente olvidados", explica Llorens. "Buscamos material en colecciones de discos de piedra de 78 revoluciones por minutos, pero también recibimos grabaciones conservadas por familiares de los cantantes".

En la galería de artistas rescatados por la colección que dirige Llorens, los discos dedicados a los tenores Miguel Fleta y Francesc Viñas, y la soprano María Barrientos, son los más solicitados fuera de España. "Han sido intérpretes irrepetibles por su forma de cantar, voces legendarias que siguen interesando a los aficionados de todo el mundo, pero especialmente a los italianos y los estadounidenses. Barrientos, por ejemplo, fue una estrella en el Metropolitan de Nueva York y nos piden sus discos continuamente a través de Internet", dice Llorens.

En el mercado catalán, el mayor éxito de ventas ha sido el disco dedicado a Emili Vendrell y la integral de Marina, de Arrieta, protagonizada por Hipólito Lázaro, Mercedes Capsir y Marcos Redondo. "No es fácil encontrar óperas completas de muchos cantantes, y en algunos casos, las que existen ya han sido editadas por otros sellos. Preferimos editar recitales seleccionando cuidadosamente el material disponible", afirma Llorens, que proyecta lanzar este año la integral de las grabaciones de Hipólito Lázaro en tres discos dobles.