Uruguay
Pese al esfuerzo por divulgar información y testimonios esperanzadores, la vida cotidiana de los uruguayos que retrató el documental Primavera uruguaya (En portada, La 2) se parece, en parte, a la que muestra la película Whisky: dura y desangelada.
Montevideo
Deuda, pobreza, un perdón consensuado sobre el olvido, familiares de desaparecidos buscando el rastro de los suyos, privatizaciones piratas, todo contribuye a complicar la vida de una sociedad que no merece tanto lastre. El presidente Tabaré Vázquez fue entrevistado para el programa. En un tono de voz milagrosamente sereno dadas las circunstancias, dijo: "Para nosotros, lo primero es atender la emergencia social". La emergencia social es el término que describe una mutación del sistema que, de repente, impone sus urgencias. "Tenemos el país abandonado", sentenció el ministro de Ganadería, José Mujica, con una expresividad muy alejada de la complaciente jerga oficial. Y añadió que un país necesita creer en algo, un deseo que resumió así: "Vivir es creer". El realismo del ministro me hizo pensar en esa canción en la que, con uruguaya suavidad, Martín Buscaglia dice: "Yo nunca pedí / lo que vos me diste".
Sociología
En Los desayunos de TVE le preguntaron a Elvira Lindo por qué no tienen más prestigio los personajes trabajadores en la novela española. Lindo, que acaba de escribir una historia protagonizada por barrenderas, respondió que no lo entiende, y recordó lo bien vistas que están las películas y novelas norteamericanas con currantes. En televisión, en cambio, la clase trabajadora y el gusto por el toque sociológicamente humilde abunda, ya sea en la especialidad de camareros (Los Serrano, Aída), o en oficios como la portería (Aquí no hay quien viva) o el servicio doméstico (Ana y los 7). Y en la historia del medio encontraríamos legendarios ejemplos de esta identificación con los trabajos más definitorios de nuestra tradición económica: Curro Jiménez (el bandolerismo) y Manos a la obra (la chapuza).
Definiciones
La televisión sigue suscitando opiniones a favor y en contra. "La televisión es un invento que te permite dejar entrar en tu comedor a personas que no te gustaría invitar", dijo una vez David Frost, animal mediático de finales del siglo XX, un siglo que, entre otras cosas, pasará a la historia por haber dejado trabajar a Matt Groening, padre de Los Simpson (Antena 3) y Futurama. Hace poco, el novelista Viktor Pelevine admitía haberse quitado de la tele para pasarse a Internet y reflexionaba sobre ambos inventos: "La televisión es fálica, te penetra profundamente con una estructura rígida de programas preestablecidos imposibles de modificar. Internet, en cambio, es vaginal. Es pasivo, es a través de tu búsqueda activa que le das forma. Y al cabo de un rato, empiezas a comprender qué se entiende por vagina dentellada".
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