Netamente americanos

Noche de reinvenciones a cargo de dos bandas que no pierden la comba del rock and roll clásico, con raíces ancladas en los cincuenta o sesenta y posterior desarrollo en los setenta. Comenzó la velada el trío madrileño Zombie Valentine, cuyo guitarrista y vocalista es el ex Stupid Baboon David de Lorenzo. Buen rock con arriesgada formación -quizá falte un teclado, un órgano Hammond- con música que viene de Link Wray o Dick Dale y pasa por los Beatles. Exceptuando que debieran intentarlo en castellano, el grupo demostró tremendo gusto musical y empeño por mantener una línea alejada de modas. Crecerán y pueden ser importantes.

Tras ellos, Jonny Kaplan, rockero de Filadelfia fascinado por el binomio Gram Parsons-Keith Richards, ofreció una buena sesión de música de raíz netamente americana, llena de ritmo y guitarras ácidas. Acompañado por el trío The Lazy Stars, del que hay que destacar al guitarrista Keith Nelson y el bajista Jimmy Ashurst, quien ha colaborado con Black Crowes, Stiv Bators o Izzy Stradlin.

Kaplan regaló un show en el que la espectacularidad viene de la fidelidad con la que el artista ataca un género que figura ya sólo en los libros de historia del rock, pero que puede producir canciones tan interesantes como Out along the highway o The best is yet to come. Buen rock and roll desde siempre, sin excesos, con estilo e incursiones en el country y el pop a un tiempo.