Los 24 dirigentes ejecutivos de la FIFA se doblan el sueldo

La voracidad económica del copresidente de la Federación Alemana de Fútbol y miembro de la FIFA, Gerhard Mayer-Vorfelder, no conoce límites. Así se desprende de una información del periódico alemán Bild Zeitung que ayer informó de que los 24 dirigentes ejecutivos de la FIFA se duplicarán sus sueldos. Mayer-Vorfelder justificó el aumento como consecuencia del "incremento de trabajo".

El diario Bild se concentra en el caso de Mayer-Vorfelder, de 72 años, y le saca las cuentas de sus ingresos. Éste personaje, ex dirigente político de la democracia-cristiana, fue 18 años ministro de Educación y de Hacienda en Baden-Wurtemberg y presidente del Stuttgart. Ahora es presidente de la DFB y miembro de la ejecutiva de la FIFA. Los escándalos han acompañado toda su carrera pero resiste en los cargos.

De sus días de ministro de Educación se recuerda que hacía cantar en las escuelas el himno alemán con la primera estrofa de los tiempos del nazismo, prohibida tras el final de la guerra, pero, eso sí, el canto iba acompañado de una explicación histórica para los escolares. Tuvo que dimitir como ministro de Hacienda. Se descubrió que Mayer-Vorfelder cobró 5.000 marcos (2.500 euros) por una conferencia en un banco del Estado que él mismo presidía.

Mayer-Vorfelder, hasta 2006, percibirá en la FIFA 76.000 euros. Luego se jubilará con una módica pensión de 22.800 euros. Como presidente de la DFB percibe una indemnización anual para gastos de seis dígitos más Mercedes de servicio. Por añadidura, de sus años de ministro Mayer-Vorfelder ingresa cada mes 10.000 euros.

El prestigioso Süddeutsche Zeitung definía a "MV", como se le conoce por su doble apellido, como "un político y funcionario deportivo siempre implicado en escándalos que siempre supera". Relata el periódico que en un partido del Stuttgart en Moscú se encontró a un periodista que había escrito un libro sobre su estancia como prisionero de guerra en la Unión Soviética tras la II Guerra Mundial. Mayer-Vorfelder lo increpó: "Si tú hubieras seguido adelante con tu blindado yo sería ahora gobernador de Moscú".

En el Stuttgart, que dejó endeudado en casi 20 millones de euros, percibía como presidente honorífico 12.783 euros al mes y de un crédito que recibió de 153.388 euros nunca más se supo. Para renovar su despacho en la DFB con muebles barrocos y pinturas recibió 116.574 euros. De un proceso por fraude fiscal se consiguió zafar tras pagar 10.000 euros a una entidad benéfica. El último baldón sobre su carrera lo ha provocado el escándalo de los árbitros comprados. Tras el fracaso de Alemania en la Eurocopa de naciones en Portugal, MV tuvo que aceptar renunciar a la mitad de la presidencia y compartirla con Theo Zwanziger en un gremio bicéfalo.

Mayer-Vorfelder resiste con una idea fija en la cabeza: aguantar hasta la celebración de la fase final del mundial el año que viene en Alemania.