"Me sabe a triunfo"
Alonso revela que su equipo valora su actuación más que el éxito de su compañero Fisichella
Melbourne dejó un magnífico sabor de boca a Fernando Alonso. Concluyó en el tercer puesto, como el año pasado, y logró la segunda vuelta rápida en carrera desde que debutó en la fórmula 1, también en el Gran Premio de Australia, en 2001. Pero el tercer puesto de ayer, cuando partía desde la 13ª posición de la parrilla de salida, le satisfizo tanto a él como, según dijo, a los miembros de su equipo. "A mí el tercer puesto me sabe a victoria porque, saliendo desde tan atrás y viendo cómo había empezado, he hecho una buena carrera y todo ha salido bien", dijo el asturiano en referencia a que en las dos primeras curvas quedó un tanto cerrado y ello le privó de ganar más puestos en la arrancada, tal como preveía basándose en su pericia en el acelerón inicial.
Otro factor que añadió mérito a su actuación fue la dificultad de verse obligado a adelantar a un piloto con la experiencia de Jacques Villeneuve. Diecisiete vueltas estuvo detrás de su Sauber: "Veía difícil coger una buena cantidad de puntos. Pensaba que un séptimo u octavo puesto era lo máximo a lo que podía aspirar. La primera vez que he adelantado a Villeneuve fue un intento desesperado. He frenado muy tarde en esa curva y me he pasado. La segunda ha sido la definitiva y ha empezado mi carrera de verdad. ya que había perdido mucho tiempo".
Alonso se fundió en un jubiloso abrazo con Fisichella tras su primera carrera como compañeros en Renault: "El equipo me ha dicho que la victoria es mía y les sabe mejor el tercer puesto, que no se lo esperaban, que el éxito de Fisichella, que sí se lo esperaban. Me veo a tope de moral y no como un tercero, sino como seis puntos que no esperaba y que le saco a Michael Schumacher".
Confesó también Alonso, tras lograr el noveno podio de su carrera, que de alguna manera contravino las órdenes de equipo. "Desde los boxes me decían en las últimas vueltas que subiese las revoluciones para intentar adelantar a Barrichello. Yo las bajaba porque veía que no podía llegar, que estaba rodando rápido. Pensé en atacarle las tres o cuatro primeras vueltas, pero no le cogía. Lo he intentado otra vez, pero nada. Adelantar a un coche que iba una décima más lento que yo iba a ser imposible".
Fisichella pudo por fin celebrar su primera victoria en lo alto del podio. En su primer y hasta ahora único triunfo, en el Gran Premio de Brasil de 2003, no pudo hacerlo porque, en principio, el triunfo fue atribuido a Raikkonen. "Ha sido la mejor manera de celebrar mi estreno con Renault. El coche ha funcionado muy bien toda la carrera y ha sido fácil de conducir. El resultado demuestra el potencial del equipo esta temporada", dijo el piloto italiano, de 32 años.
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