"Todos nos juegan a la inglesa"

Con la convicción propia de los ganadores, el holandés Frank Rijkaard se mostró satisfecho con la victoria del Barcelona y disculpó las carencias ofensivas de su conjunto con el corto marcador. "Sabíamos que se trataría de un partido complicado y muy trabado, pero hemos merecido ganar por la actitud de los jugadores".

En su alocución, el entrenador del cuadro catalán se sorprendió del juego desplegado por los osasunistas y lo achacó a su conocimiento de los azulgrana respecto al trato del balón. "Nos pasa a menudo. Nuestros rivales quieren evitar el juego normal del centro del campo y pugnan por los balones largos y el estilo a la inglesa. Todos los equipos lo están haciendo contra nosotros", aseguró a tres días de su enfrentamiento de los cuartos de final de Liga de Campeones contra el Chelsea, londinense. "No puedo comentar que ha sido un partido bonito, pero sí atractivo y bastante directo", agregó.

El holandés pasó de largo sobre la autoridad de su cuadro. "En el campo de Osasuna estamos contentos de haber cumplido con nuestro trabajo. La autoridad se demuestra cuando marcas más goles. Pero luchar es la clave para ganar estos partidos importantes", explicó. "Cuando olvidamos la calidad y el talento, es necesario robar la pelota, así como el sacrificio, la mentalidad y la actitud. He visto a todos los jugadores apretando para recuperar el balón durante todo el partido y volver a controlarlo", comentó satisfecho.

Tampoco se mostró Rijkaard partidario de asimilar el partido de ayer en Pamplona y el del miércoles en Londres. "No se pueden hacer comparaciones ni decir si es suficiente con lo que hemos hecho hoy

para ganar y lo que tenemos que hacer contra el Chelsea. Nos espera un partido muy diferente en Londres", concluyó.

"Muy raro"

Por su parte, el técnico de Osasuna, Javier Aguirre, hizo una valoración más crítica del encuentro, aunque apuntó que se podía haber salvado un punto. "Hicimos un partido muy raro, con el primer tiempo muy metidos atrás, pero controlando al Barcelona. Fuimos víctimas de nuestros propios errores", apuntó.

La jugada clave del encuentro, una pérdida del balón de Muñoz en el centro, fue analizada pormenorizadamente por el mexicano: "Tratamos de jugar en el centro del campo en vez de sacarla, perdimos el balón y nos metieron el gol. Perdimos la pelota en un error nuestro y eso es lo que más irrita al equipo".

Una de las prerrogativas que Aguirre postulaba para el choque de ayer, la presión en toda la cancha, se diluyó en el minuto 10 y ayudó al Barcelona a acomodarse sobre la hierba navarra. "Durante la primera mitad no estuvimos en el partido y nos fueron metiendo atrás gracias a la técnica de cinco o seis peloteros que tienen y que dominan el juego. La calidad de este rival no permite jugar cómodo", aseveró con pesar.

Las oportunidades en la Liga se han acabado para Osasuna, por lo que su entrenador anunció que el único objetivo actual es el de conseguir 11 puntos que garanticen la permanencia en la categoría: "Nos encontramos en una situación comprometida, difícil, crítica... Pero estamos convencidos de que nosotros solos nos metimos en esto y también nosotros solos debemos salir de ello". "Conseguir 11 puntos en once partidos no es una locura. Parece factible. Es sólo el 33%", finalizó.