La Ertzaintza disuelve a hinchas del Athletic al término del partido
El clima áspero que vivió la eliminatoria, tras la suspensión del primer partido en Viena, se trasladó a las gradas. Apenas dos centenares de hinchas del Austria de Viena se desplazaron a Bilbao y no fueron bien recibidos por los aficionados del Athletic. En previsión de posibles incidentes, la Ertzaintza desplegó un dispositivo para facilitar la entrada al campo de estos hinchas antes del partido. Durante el encuentro, el intercambio de insultos y provocaciones fue constante, lo que hizo que se retrasara la salida de los seguidores austriacos aproximadamente una hora. Al termino del partido, aficionados de uno y otro equipos se lanzaron distintos objetos lo que provocó que se retuviera a los seguidores del Austria de Viena, en tanto la Ertzaintza trataba de disolver a algunos aficionados radicales del Athletic que esperaban en las puertas de salida. La policía vasca tuvo que recurrir al lanzamiento de botes de humo y pelotas de goma para disolver a los aficionados del Athletic y facilitar el desalojo de los austriacos, cuyos autobuses esperaban a la salida de las puertas de San Mamés.
El clima de crispación se tradujo también al interior del estadio, donde algunos aficionados del Athletic se encararon con los vigilantes de seguridad. La frustración era total e hizo explotar el mal ambiente que ha definido una extraña eliminatoria resuelta finalmente a favor del Austria de Viena. La euforia desatada en San Mamés hizo que se digiriese mal la derrota y la eliminación del Athletic acabó plagada de incidentes, algo que no se vivía desde hacía algunos años en Bilbao.
Cansancio
El entrenador del Athletic, Ernesto Valverde, consideró como aspectos claves en la derrota, el primer gol visitante y el cansancio acumulado por sus jugadores en el transcurso de la eliminatoria. "No hemos podido soportar el ritmo que solemos imprimir en casa. Según se ha ido desarrollando el partido hemos ido sufriendo el cansancio y ellos estaban más fuertes. Al final [Tony] Polster tenía razón cuando decía que íbamos a acusar el duro mes de enero", dijo Valverde.
El técnico lamentó que el Athletic no supiera "cerrar el partido con el 1-0". "Hemos tenido ganada la eliminatoria pero no hemos podido cerrarla y hemos concedido demasiado. El primer gol fue una desgracia y ahí nos hemos descompuesto. Hemos ido por la tremenda, pero no ha podido ser", admitió. Para Valverde, "es posible que el entorno" del club rojiblanco haya minusvalorado al rival, pero aclaró rotundamente que tanto él como su equipo no lo hizo.
El entrenador del Athletic admitió que el Austria le gustó más que en el partido de ida y reconoció también que el vestuario de su equipo ha quedado "tocado" después de esta derrota. "Ahora, lo que me preocupa es recuperar a los jugadores para el miércoles de cara a la Liga. Ahí es donde debemos apretar", recordó".
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