Agresión sindical

El día 16 de febrero un grupo de ex-trabajadores del Servicio Andaluz de Empleo se presentaron en la sede de CC OO en Sevilla para protestar por la colaboración de este sindicato en el despido masivo de mil trabajadores de las oficinas de empleo. No se les ocurrió otra cosa que golpear a una compañera provocándole lesiones que se suman al engaño que hemos sufrido por parte de José Antonio Viera (actual secretario provincial del PSOE en Sevilla), al trauma y a la frustración de vivir el paro. No sólo han golpeado a una compañera, han causado una profuna herida y dolor a todo un colectivo de trabajadores que luchan por su puesto de trabajo. Ahora han preferido correr un tupido velo y ni tan siquiera investigan. Nuestros sindicatos luego se quejan de que los trabajadores y parados no se afilian: ¿No les recuerda esta situación a cuando un trabajador en el régimen de Franco prefiría no acudir a los tribunales porque sabía de antemano que no le darían la razón? (En varias décadas sólo se le dió la razón a los trabajadores en un 18% de los casos).

Han preferido la concertación social, el reparto de fondos para formación y tener la sensibilidad como un témpano de hielo para la gente que sufre y es víctima de la precariedad laboral. Nunca hemos pedido nada imposible, hemos pedido una solución porque todos los parados valemos lo mismo, los de astilleros, Isla Mágica, etc. Hemos sido vuestra diana fácil para defender no se qué intereses generales y os habéis ensañado hasta la vileza llamándonos advenedizos y otras lindezas que prefiero olvidar.

Siento pena al ver un sindicato "institucionalizado" convertido en voz del régimen y de su amo; ignorantes de una clase obrera formada por mil trabajadores que está creando una memoria histórica en la que el sindicalismo mayoritario en Andalucía vale para que te "apaleen y encima te llamen puta".