El Albacete fulmina a su técnico

El Numancia se negó ayer a ser enterrado en la Liga y el que lo pagó más caro fue José González, el técnico del Albacete. Cuando todo apuntaba a su defunción en el Carlos Belmonte, con el marcador en contra ante un rival directo y un juego para olvidar, el equipo numantino resurgió en Albacete para darle la vuelta al resultado y mantener un hilillo de esperanza en su salvación. Una permanencia por la que deberá remangarse también el Albacete, que creyó muerto al Numancia y lo pagó bien caro. De momento, la lucha ha comenzado con a directiva despidiendo al entrenador.

El dominio fue desde el principio cosa del visitante. La pegada, del Albacete. Mark González avisó en un potente disparo con la zurda en un carrerón en solitario, y poco antes del descanso el chileno acertó con un violento tiro con efecto y a la carrera que sorprendió a Juanma. El tanto pareció desmontar definitivamente al Numancia. Cualquier propuesta futbolística era pobre, miedosos como jugaron los dos conjuntos por su lugar en la tabla, pero al menos el Albacete le ponía al encuentro algo de picante: el juego por bandas de Mark González y Peralta, por ejemplo, o el brío de Pacheco.La fortuna cambió para el Numancia en la segunda parte. Mucho tuvo que ver el Albacete, que cedió el balón, el campo y la ventaja. Merino empató de penalti -tuvo que repetirlo por invasión del área- cometido sobre Miguel por Santi, que debutaba este curso con el Alba, y Jaime dejó a su equipo con un jugador menos por protestar y encararse al asistente de Megía Dávila, costumbre que no ha perdido en toda su carrera.

El Numancia lo aprovechó casi obligado, porque fútbol no le sobra, pero la ocasión era que ni pintada. A cinco minutos del final, Miguel anotó el gol del triunfo soriano en un contragolpe que evidenció lo mal que defendía el Albacete. Juanlu dejó atrás a Santi y cruzó el balón para que el delantero volteara el marcador. Un tanto para la esperanza soriana, precisamente el día en que el Numancia cumplía 100 partidos en Primera. Y en el que rompía su racha de 10 jornadas sin ganar con su primer triunfo fuera de su estadio en toda la Liga. Para el Albacete, despedido por su afición con pitos y pañuelos al grito de "fuera, fuera", siguen las preocupaciones.

La directiva reaccionó como suele ser habitual: despidió al técnico, José González, de 38 años, apenas tres horas después de concluido el choque. El técnico del filial, Martín Monteaguado, ocupará su lugar.