Tendencias
EL AUGE de los todoterrenos ha sido una de las tendencias destacadas del mercado español en 2004. Pero lo más curioso es que el despegue se produce en los modelos más caros, que cuestan más de 45.000 euros en la mayoría de los casos y se están convirtiendo en la alternativa a las berlinas de lujo para muchas familias con economías saneadas. Los nuevos 4×4 de prestigio aportan más espacio interior, son más prácticos para quienes practican deportes de invierno o actividades al aire libre y tienen una imagen menos clásica y seria que los turismos de lujo. Así, mientras las ventas de berlinas de lujo han caído un 7,1% el pasado año en España, los todoterrenos han rozado las 100.000 unidades, con un 18,9% de aumento, según la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y camiones (ANFAC). Y casi 20.000 corresponden a marcas de prestigio.
El líder en esta subcategoría ha sido el Mercedes ML. Se ha beneficiado de los descuentos habituales en los coches que se acercan al final de su ciclo de vida (el nuevo ML saldrá en julio) y ha logrado unas ventas de 3.797 unidades. Le han seguido de cerca los BMW X5 (3.310), VW Touareg (3.239), BMW X3 (2.657), Volvo XC90 (2.632) y sobre todo el Porsche Cayenne (1.489), según datos de la Federación de Concesionarios de Automoción (Faconauto). El último es el más sorprendente porque la versión más asequible cuesta 53.720 euros y la que concentra la mayoría de las ventas (Cayenne S) sube a 67.800 euros. Y no tiene motores turbodiésel, que suponen casi el 90% de las ventas en sus rivales.
Por el contrario, las versiones familiares o break no terminan de triunfar en el mercado nacional. Mientras en algunos países europeos, como Alemania e Italia, estas carrocerías suponen hasta el 60% de las ventas en muchos modelos, en España apenas llegan al 15%. Pero van ganado peso relativo poco a poco, y la tendencia es ascendente.
Un fenómeno similar se está produciendo con los cambios automáticos en Europa, que se imponen en los coches más caros. Las nuevas cajas con accionamiento secuencial, en muchos casos con mandos en el volante, están animando el mercado y representan ya el 20% de las ventas europeas.
