_
_
_
_
_

La Audiencia rectifica y encarcela al violador que quedó libre por error

Dos de los tres jueces creen que existe riesgo de fuga y de que reincida

Marcha atrás. La Sección Segunda de la Audiencia de Barcelona rectificó ayer las decisiones que había adoptado hasta ahora y ordenó el encarcelamiento de Tomás Pardo Caro, el hombre que quedó libre por error judicial el pasado 1 de noviembre y que semanas después fue condenado por el mismo tribunal a penas que suman 25 años y medio de cárcel por violación, detención ilegal, tentativa de homicidio y otros dos delitos de robo.

Pardo fue detenido ayer mismo, cuando acudió a firmar ante el tribunal de la Sección Segunda, como cada día, y se le comunicó que debía quedarse y asistir a una vista judicial. Durante ese trámite el fiscal solicitó el encarcelamiento y el hombre salió esposado de la sala hacia la cárcel.

Tras dictarse la grave condena contra Pardo el pasado mes de enero, la fiscalía pidió su encarcelamiento, pero el tribunal lo desestimó al considerar que no estaba justificado porque iba cada día a la Audiencia. La fiscalía recurrió esa decisión y el tribunal la ha vuelto a desestimar, aunque en la parte dispositiva se acuerda la prisión, como pedía el fiscal.

Se trata de un auto de alambicada elaboración en el que el tribunal razona que toma esa decisión no porque se lo reclame el fiscal, sino porque la defensa del acusado ha recurrido la condena ante el Tribunal Supremo. Sin embargo, los magistrados Javier Arzúa y José Carlos Iglesias exponen argumentos idénticos a los que en su día planteó el fiscal para acordar la prisión.

Así, el tribunal afirma que existe "un riesgo serio de fuga por parte de quien, en caso de desestimarse su recurso, tendrá que pasar muchos años interno" en la cárcel. Los jueces también recuerdan que Pardo mantiene una relación sentimental con una mujer, pero no tiene hijos ni otros vínculos familiares, lo que aumenta también el riesgo de fuga. La Audiencia añade igualmente que el condenado fue despedido de su trabajo y, lo que es más grave, que puede volver a violar. En este sentido, el auto recuerda la salvaje violación que sufrió una de las mujeres a punta de navaja y cómo fue acuchillada después. Por todo ello, estos dos jueces entienden que el hecho de que cada día acuda al tribunal a firmar "no garantiza que el procesado no pueda darse a la fuga, ni reincidir en el delito".

El presidente del tribunal, Pedro Martín, ha formulado un voto particular contrario al encarcelamiento al considerar que la ley no lo permite, tras realizar un análisis semántico de algún artículo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_