"No quería que mi permanencia fuera un elemento de distorsión de las cámaras"

José Manuel Fernández Norniella ha dejado la presidencia del Consejo Superior de Cámaras, un año y medio antes de cumplir su mandato, para abrir una nueva etapa con la presidencia de Javier Gómez-Navarro como candidato bien visto por el actual Gobierno y con el aval de las cámaras hecho público la pasada semana. Fernández Norniella, ovetense de 58 años, de formación empresarial, ha dedicado una etapa desde 1993 a 1997 a la política desde la filas del PP como hombre de confianza del anterior vicepresidente del Gobierno, Rodrigo Rato. Desligado ya de responsabilidades en el PP, Fernández Norniella asegura que él deja el puesto en el Consejo por motivos personales. A su entender, lo importante es que las cámaras mantengan una buena sintonía con el Gobierno para que sean cada vez más operativas, ayuden a fomentar las vocaciones empresariales y apoyen a la pequeña y mediana en toda España.

Pregunta. ¿Qué motivos le han llevado a dejar la presidencia del Consejo de Cámaras?

Respuesta. Únicamente motivos personales. Tomé esta decisión en los meses de abril y mayo pasado, y lo comuniqué a las cámaras en septiembre. Yo he acabado un proyecto y ahora es necesario que alguien lo potencie.

P. Entonces, ¿usted no ha sentido la presión política del nuevo Gobierno del PSOE?

R. Hablar del pasado no resulta saludable. Creo que mi etapa se ha cubierto y no quería que mi permanencia se pudiera convertir en un elemento de distorsión de estas entidades que están para defender a los empresarios.

P. ¿Están muy politizadas las cámaras de comercio?

R. Ni más ni menos que otros sectores de la sociedad de los que vemos en la vida diaria. Forma parte de la vida y cada persona tiene derecho a tener su propia opinión, pero no creo que esto sea un problema.

P. ¿Considera que el actual Gobierno está tratando de relevar a los presidentes de las empresas privatizadas?

R. Estamos hablando de las cámaras de comercio y eso se podrá hablar en otro momento. En ese tema, ni quiero ni debo entrar.

P. ¿Por qué se queda como vocal entre los ocho notables una vez que deja la presidencia?

R. Al igual que puse mi cargo de presidente a disposición del pleno, puse el de vocal por si valía para que entrara un nuevo candidato. No ha sido necesario y por ello me quedo hasta julio de 2006 con el ánimo de colaborar en todo lo que sea necesario.

P. ¿Se ha sentido apoyado por las cámaras tras el pleno de noviembre en el que pidieron que el presidente saliera del propio pleno?

R. Siempre me he sentido apoyado. Las cámaras son entidades mayores de edad que han abierto un diálogo interno para reflexionar y ver cuál era el mejor candidato tras mi anuncio de marcha. Lo peor es que no hubiera habido ese debate y las cámaras no hubieran resuelto la búsqueda de un candidato para el futuro.

P. ¿Qué opinión tiene del candidato a sustituirle, Javier Gómez-Navarro?

R. He hablado unas cuatro vese con él y sería absurdo dar una opinión. En todo caso, le deseo toda la suerte en su gestión porque, en la medida que lo haga bien, las cámaras se beneficiarán de ello, que es lo más importante. El candidato ha demostrado que tiene ilusión por el puesto y eso es importante. Ahora lo que hace falta es que tenga un proyecto, porque las cámaras están en un buen momento.

P. ¿Cree que tendrá una votación favorable en el pleno del día 10 de febrero?

R. Repito que las cámaras son mayores de edad. El hecho de haber reflexionado sobre la candidatura y que se haga público con el aval de los vicepresidentes hace que la votación vaya dentro de la normalidad. Luego, el voto es secreto pero creo que las cámaras son entes maduros.

P. Cuando usted llegó a la presidencia del consejo, las relaciones entre las cámaras y la patronal CEOE no eran buenas. ¿Cómo lo resolvió?

R. Era más el ruido que las nueces. Realmente no eran malas las relaciones. Son proyectos diferentes con cometidos diferentes. En mi periodo hemos tratado de consolidar a las cámaras como entidades prestadoras de servicios a las empresas, mientras que la CEOE debe ejercer otro papel. En las cámaras, creo que se ha producido una catarsis muy importante y que hoy son mucho más útiles, sobre todo para las pequeñas y medianas empresas y para la generación de nuevos empresarios. Se han creado más de 7.500 nuevas sociedades, 100 viveros de empresas y 250 antenas empresariales que son gestores de las cámaras en los pequeños municipios.

P. ¿Existe en estos momentos alguna disputa por tema de cuotas o con la patronal CEOE?

R. Nada en absoluto. Las cámaras están embarcadas en un gran proyecto de apoyo a la empresa y con buenas relaciones con la patronal CEOE, y creo que la labor de las cámaras son complementarias con la que puede hacer la patronal y que son muy útiles.

P. ¿Podía haber seguido en su puesto con el actual Gobierno?

R. Yo no he tenido ningún problema con el Gobierno y las cámaras son entidades que tienen que seguir su trabajo al margen de quien esté en el Gobierno en ese momento.