El estado actual de la fotografía

Si no hay afición ni mercado, no hay coleccionismo, y sin coleccionistas, el arte no sobreviviría. Esta convicción llevó el año pasado a Enrique Ordóñez (San Sebastián, 1946) a organizar la primera Feria Internacional de Fotografía Contemporánea y Vídeo de San Sebastián, DFOTO, la única de estas características que se celebra en España. "El experimento [que atrajo a 12.000 visitantes, 240 de ellos especialistas en el sector] salió muy bien", según sus palabras, y se decidió convertirlo en cita anual con el mundo de la imagen. DFOTO reunirá este año, entre el 14 y el 17 de abril próximos, a 41 galerías -19 españolas y 22 extranjeras-, que mostrarán la obra de unos 400 artistas de los cinco continentes.

"Será una feria más visual, más sorprendente que la del año pasado", dijo ayer Ordóñez, responsable del Centro de Fotografía que impulsa esta iniciativa y que forma parte del futuro Centro Internacional de Cultura Contemporánea donostiarra. La programación aún no está cerrada, pero ya se sabe el nombre de las galerías que ocuparán los 3.500 metros cuadrados expositivos que se habilitarán en el Kursaal. Un total de 27 de ellas ya acudieron el año pasado, por ejemplo, Fucares, de Madrid; Tony Tàpies, de Barcelona; Van Zoetendaal, de Amsterdam; Mai 36, de Luxemburgo o Vu' la Galerie, de París. "Las que no repiten es porque tenían compromisos con las ferias de México y Bruselas", explicó Ordóñez.

En todo caso, son las nuevas incorporaciones las que abren nuevos horizontes a la feria. En 2004, su alcance fue europeo, pero este año trasciende el ámbito continental con la presencia de Marvelli, de Nueva York, y Silk Road, de Teherán, dos galerías conocidas por su afán de mostrar las formas emergentes de hacer fotografía y vídeo. La iraní presentará el trabajo de cinco mujeres artistas de su país que encarnan una "nueva forma de mirar".

DFOTO, que también ha seleccionado a las galerías Espacio Marzana, de Bilbao; Distrito Cuatro/DV, de San Sebastián, y Moisés Pérez de Albéniz, de Pamplona, no quiere limitarse a exponer la obra de autores más o menos consagrados. Ambiciona ofrecer una radiografía del estado actual del arte fotográfico, desde el convencial hasta el conceptual, y el vídeo, empezando en los años 60 para llegar a la actualidad. "Se trata de enseñar nuevos lenguajes, ver por qué artistas apuestan las galerías para el futuro, de difundir la obra de autores conocidos en sus lugares de origen, pero cuyas creaciones no son fáciles de ver en otros países", resumió Ordóñez.

Cada galería -entre ellas, Magnum Photos y Gilles Peyroulet&Cie, de París, y tres editoriales- presentará obras de entre seis y diez autores con precios que oscilarán entre 2.000 y 20.000 euros. Aún no se conoce el listado completo, pero los responsables de DFOTO avanzaron ayer varios nombres: Larry Towel, Nick Wapington, Tacita Dean, Guillermo Gómez Peña, Tatiana Darceno, Luis González, Ana Pérez Ortega, Bleda i Rosa, Iñigo Rojo o Pierre Gonnord, uno de cuyos retratos sirve de imagen a esta muestra, que acogerá a la par la reunión de conservadores de colecciones de empresa y varias exposiciones complementarias. Además albergará, "por primera vez en una feria", una librería especializada que pretende ser el primer paso de un proyecto más ambicioso de edición.

DFOTO ultima sus detalles mientras apela al compromiso institucional con estas disciplinas. "Seguimos demandando su implicación para que inviertan en fotografía y vídeo. Es casi una obligación moral, porque no se trata de una apuesta por el coleccionismo sino por el patrimonio". Las galerías que participaron en la feria el año pasado se quejaron precisamente de esto, de que las instituciones no compraron nada. ¿Y cuánto vendieron? "Diría que el doble del doble de lo que dijeron", respondió Ordóñez eludiendo la pregunta.