Bruselas pide a los nuevos líderes que integren a los suníes

"Coraje" y "determinación" fueron las palabras que ayer más se oyeron en Bruselas asociadas a los iraquíes y a su alta participación en las elecciones del domingo en Irak. Tras los elogios y el homenaje al valor mostrado por los electores al acudir a las urnas bajo tantas amenazas, vinieron las apreciaciones complementarias. La Comisión recordó que va a seguir prestando ayuda económica a la reconstrucción.

Por su parte, el Consejo de Ministros insistió en la necesidad de lograr la máxima inclusión en el proceso democratizador, en referencia a los suníes, y la OTAN afirmó que aumentará su apoyo al nuevo Gobierno en los meses venideros.

"Estas elecciones representan una etapa importante en el proceso de transición democrática (...) los primeros pasos del pueblo iraquí por el camino de la democracia, la libertad y la paz, que seguirán más allá del periodo de transición", señalaban los ministros de Exteriores comunitarios. "La Unión Europea reitera su compromisos de apoyar al pueblo iraquí en este objetivo y subraya la importancia de obtener el máximo de inclusión en el proceso". El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso recordó que Bruselas ha contribuido con 31,5 millones de euros al proceso electoral, va a entregar 2.000 millones para la reconstrucción en 2005 y ha enviado ya otros 320 millones desde el fin de la guerra.

"La participación suní es fundamental" para el futuro, dijo Miguel Ángel Moratinos, ministro de Exteriores de España, quien definió la ausencia de esta minoría en las urnas como "el único borrón" de los comicios. Moratinos, como su colega francés, Michel Barnier, recalcó la importancia de que el proceso que ahora se abre, con la elaboración de una Constitución, incluya a todas las comunidades para que ninguna se sienta excluida. "Habrá que velar porque las instituciones permitan una representación equitativa", dijo el ministro francés. "El momento de la verdad será la preparación de la nueva Constitución".

Mientras la parte civil de Bruselas celebraba el triunfo del proceso político, el secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop Scheffer, hablaba de "un mejor futuro para el país: un futuro de mayor paz y seguridad" al que la comunidad internacional debe contribuir decididamente. "La OTAN ya ha empezado, al responder a la petición de los iraquíes de preparar y equipar a las fuerzas de seguridad iraquíes, y la Alianza incrementará su apoyo en los meses venideros".

España y Francia, muy críticos con la intervención estadounidense en Irak, se han resistido a participar en este tipo de operaciones de la OTAN. Barnier aseguró que su Gobierno está dispuesto a preparar policías iraquíes fuera de Irak.

El ministro luxemburgués de Exteriores, Jean Asselborn, señaló que esperaba ver para finales de año una retirada de las tropas extranjeras de Irak. "El Estado de derecho sólo funciona si el Estado no está ocupado", dijo el presidente de turno de la Unión. Tras las elecciones previstas para diciembre, después del referéndum constitucional de octubre, "será un buen momento para decir que el país puede hacer su propia vida".

Ayer también, los ministros de la UE aceptaron el plan de 10 puntos elaborado por Javier Solana, alto representante para la Política Exterior de la Unión, y Benita Ferrero-Waldner, comisaria de Relaciones Exteriores, para reforzar una relación de privilegio con Ucrania. Quedó claro que la adhesión de Kiev es algo que ahora Bruselas no contempla.