Ferrari firma con Ecclestone hasta 2012 por más dinero

En un acto de responsabilidad, según sus directivos, y de falta de ética, según algunas otras escuderías, Ferrari firmó ayer un acuerdo con la Federación Internacional del Automóvil (FIA) y con Formula One Management (FOM), la empresa que dirige Bernie Ecclestone, para renovar los acuerdos de la Concordia, que concluían en 2007, desde 2008 hasta 2012. La posición de Ferrari, que se aseguró un aumento considerable de ingresos, convierte en inviable el proyecto de varias escuderías, entre ellas la de Maranello, de crear un campeonato del Mundo alternativo a partir de 2008.

Ferrari es miembro todavía de la compañia Gran Prix World Championship (GPWC) en la que están integradas Mercedes, Renault y BMW. Todos estos equipos habían formado un potente bloque de oposición a Ecclestone cuando éste vendió la mayor parte de los derechos televisivos a Kirch y amenazó con ofrecer las carreras en cadenas de pago. Aquello provocó la amenaza de crear un campeonato alternativo para la F-1, cuando concluyera el compromiso de la Concordia en 2007. "No creo que éste sea el final de GPWC, pero sí del proyecto de un Mundial alternativo", confesó Paul Stoddart, patrón de Minardi. "No sé si hay algo siniestro en todo esto, pero es un gran golpe de Bernie Ecclestone".

La decisión de Ferrari deja en la estacada a las demás escuderías, que deberán posicionarse en los próximos días. "Es un buen acuerdo porque se trata de la escudería más veterana y asegura el futuro desarrollo del campeonato actual", comentó Max Mosley, presidente de la FIA. "Creo que este acuerdo dará a la F-1 una estabilidad que se estaba perdiendo", agregó Ecclestone, que mantiene el 25% de las acciones de la empresa Slec, que posee los derechos de explotación comercial de la F-1. El 75% restante fue a parar a manos de los bancos Bayerische Landesbank y JP Mogan and Lehman Brothers, después de la quiebra del gigante alemán de la comunicación Kirch. Ecclestone ha mantenido contactos con las demás escuderías a las que ha prometido un incremento de 384 millones de euros en sus ingresos en los próximos tres años.

"Este acuerdo está en la línea que nos hemos marcado de asegurar la continuidad del Mundial", explicó Luca di Montezemolo, presidente de Ferrari, aludiendo a su responsabilidad. El desmarque de los bólidos rojos de Maranello del resto de escuderías volvió a quedar patente cuando esta misma semana decidieron quedarse a entrenar en Montmeló, a pesar de encontrarse con un nuevo asfalto. Otras escuderías, como Sauber y Renault, se marcharon a Valencia. Pero Michael Schumacher, que debutó esta temporada, marcó un tiempo de 1m 14,8s, muy cercano al de su propio récord del circuito.