Los camiones tendrán prohibido el paso tres semanas por el puente de la M-30 dañado

La rotura de una correa provocó la colisión del camión que circulaba el martes por la M-30 con el puente de San Luis, en el llamado nudo de Manoteras. La correa, según fuentes de la investigación, sujetaba una máquina perforadora que al quedar libre de la atadura dio más altura de la permitida al camión, que sobrepasó así los 4,53 metros de altura del puente. Las tareas de reparación de este paso elevado, que comenzaron el mismo martes, se prolongarán durante tres semanas; durante este tiempo, los vehículos pesados tendrán prohibido el paso por el puente.

Antonio G. B., el conductor que llevaba el camión de la empresa Moreno López Sánchez, SA, de Collado Villalba no tenía la menor duda de que iba a pasar sin problemas por debajo del puente de San Luis. La medición de la carga no superaba los 4,53 metros de gálibo del puente. Pero lo que no sabía al parecer el conductor era que la correa que sujetaba el brazo de la máquina perforadora se había roto y que la altura de la carga excedía de la debida.

Éstos son los primeros datos obtenidos en la investigación abierta sobre el caso. El incidente ocurrido a las 6.00 de la mañana del martes provocó un gran atasco no sólo en la M-30, sino en toda las vías de la zona norte de la ciudad. Los técnicos municipales calculan que al menos 100.000 coches se vieron atrapados por el accidente que obligó a cortar esta vía de circulación hasta el mediodía de manera completa y en parte hasta por la tarde.

Ayer en la empresa Moreno López Sánchez, en Collado Villalba, la empleada que respondía al teléfono se negó a hablar de lo sucedido. Tampoco este periódico consiguió la versión del camionero, por "estar de viaje". La empresa propietaria del camión ha decidido guardar silencio mientras la investigación esté abierta. Los dueños del camión sí saben que al menos deberán afrontar una multa de 1.500 euros, que es la sanción máxima que prevé el Reglamento de Circulación para una infracción como ésta. Según los datos facilitados por la dirección de Movilidad de la Concejalía de Seguridad del Ayuntamiento de Madrid el atasco en la carretera de Burgos se extendió a lo largo de 20 kilómetros, mientras que en la de Colmenar Viejo alcanzó los 18 kilómetros.

Ayer los técnicos municipales, dependientes de la Concejalía de Urbanismo, seguían trabajando en las tareas más urgentes de reparación del puente de San Luis.

Las obras comenzaron el mismo martes por la noche. "A las 23.00 se cortó todo el tráfico de la M-30 en esa zona", explicó un portavoz de Urbanismo. "Lo primero que se hizo fue retirar la viga afectada por el choque del camión con el puente. El peligro más inminente en ese momento era que la viga de desprendiera. El tráfico se restableció en su totalidad a las 6.00 del miércoles".

Según el estudio realizado por los ingenieros municipales, dirigido por Juan de la Heras y Manuel Arnaiz, es necesario reparar la viga anterior y la posterior a la ya retirada, porque éstas también presentan importantes desperfectos. Estos trabajos estaba previsto que se realizaran ayer por la noche, por lo que de nuevo el tráfico por esta zona de la M-30 iba a ser cortado en su totalidad de madrugada. "Inicialmente sólo pensábamos restringir los carriles de circulación, pero los técnicos nos han aconsejado cerrar del todo", explicó ayer Javier Conde, responsable del área de Movilidad del Ayuntamiento de Madrid. "A esa hora no se crean demasiados problemas de circulación porque el tráfico desciende mucho".

35.000 coches afectados

Según los datos ofrecidos ayer por el área de Movilidad cada día transitan por encima del puente una media de 14.770 coches, mientras que por debajo de este paso circula una media de 69.970 vehículos al día. "Si hacemos una extrapolación, podemos decir que durante el tiempo que estuvo cortado el tráfico por la colisión del camión se vieron afectados unos 35.000 vehículos".

Las tareas de reparación del puente de San Luis todavía se prolongarán varias semanas. Una vez que se reparen las dos vigas afectadas se procederá a sustituir la retirada. "Los técnicos todavía están realizando estudios para encargar su construcción. Sabemos que debe de medir unos 20 metros y tener una anchura de algo más de un metro y medio", señalan en Urbanismo. Lo que todavía no saben los ingenieros es el tiempo que se tardará en fabricar esta viga. "Calculamos que serán unas tres semanas", añade el portavoz de Urbanismo.

Aunque el puente de San Luis tiene 12 vigas y sólo se ha retirado una, los ingenieros han recomendado prohibir durante estas tres semanas la circulación a los vehículos pesados.