El movimiento hotelero en la Costa del Sol baja por segunda vez en tres años

El sector turístico andaluz ha cerrado 2004 con un crecimiento apreciable de la actividad, un 3% según las estimaciones de la Junta, pero con un contraste de luces y sombras enmascarados en el balance. La llegada de turistas extranjeros ha vuelto a descender, y es especialmente sensible en el principal destino andaluz, la Costa del Sol, donde el movimiento hotelero experimenta por segunda vez en tres años una evolución negativa. "Ha sido un buen año, pero sin echar las campanas al vuelo", asegura el consejero de Turismo, Paulino Plata.

Entre enero y noviembre, los hoteles de la provincia de Málaga habían perdido un 2% de clientes y contabilizado un 4,7% menos de estancias que en el mismo periodo del año 2003. En el conjunto de Andalucía, las pernoctaciones aumentaron un 5,2% debido al excelente comportamiento del mercado nacional, y en las otras siete provincias la evolución del número de estancias fue positiva, con fuertes crecimientos en Huelva (34,8%), Cádiz (15,9%) y Almería (12,9%), las tres únicas que no perdieron visitantes extranjeros. Según las cuentas de Turismo, las pernoctaciones totales en 2004 rozan los 40 millones en Andalucía y el número de viajeros supera los 22 millones, un 3% más que el año anterior.

Lejos de una situación de crisis -los hoteles de Málaga registraron hasta noviembre 14 millones de pernoctaciones y la oferta de nuevas plazas no cesa-, la coyuntura de la Costa del Sol requiere de un cambio de estrategia, según convienen en apreciar los empresarios del sector y la Administración autonómica.

La Junta trabaja ya en la formulación de un plan de recualificación del sector que, según Plata, será muy ambicioso e implicará a diversas consejerías. El consejero espera presentarlo al sector en los primeros meses del año para que hagan sus aportaciones y lograr el mayor consenso posible. Según Plata, las medidas a adoptar "afectan desde la ordenación urbanística o los transportes y los servicios públicos, hasta la promoción turística". El consejero resalta que pese a todo, el movimiento en los hoteles de cuatro estrellas de la Costa del Sol aumentó un 7%, lo que en su opinión indica que el turista aprecia la calidad, por lo que insiste en que ahora es preciso extenderla a todos los servicios y actividades que se prestan fuera de los hoteles.

Para los empresarios, que se quejan de ciertas deficiencias en la promoción en los últimos años, resulta esencial reforzar la imagen de la Costa del Sol. Según el presidente de la Asociación de Agencias de Viajes, Francisco Pérez, el gran valor de esta zona es el clima, por lo que entiende que "hay que atacar los mercados con campañas específicas por segmentos como los de salud, congresos o deportivos, y con promociones personalizadas". El presidente de la patronal hotelera malagueña, José Prieto, se queja por ejemplo de que en los últimos tres años ha descendido la demanda de turistas de golf, que achaca a la imposibilidad de practicar este deporte "a precios razonables".

Entre enero y noviembre de 2004 se alojaron en los hoteles de la Costa del Sol 3.380.526 turistas, que produjeron 14,3 millones de pernoctaciones, por lo que en el balance del año difícilmente se llegará a los 15 millones de estancias. Desde el año 2000, únicamente en 2002 no se alcanzó esta cifra, y se contabilizaron 14,8 millones, unas 400.000 menos que en 2001. El número de turistas extranjeros alojados en los hoteles malagueños descendió hasta noviembre un 7,1%, pero aún mayor fue la pérdida en las pernoctaciones que produjeron, 11,3%.

En el conjunto de Andalucía, el número de clientes de hotel extranjeros también descendió hasta noviembre un 2,8%, con un 4,4% menos de pernoctaciones, pero la afluencia de turistas españoles aumentó un 12% y sus estancias un 15%.