Tirar la piedra
Tirar la piedra y esconder la mano, es lo que ha venido haciendo, durante las últimas semanas, el presidente Camps y su cohorte, con especial entusiasmo los consejeros González Pons y Font de Mora. Lo han hecho con reiteración y virulencia, crispando y dividiendo a la sociedad valenciana -ahora en el tema de la lengua- apelando a unas señas de identidad que ellos -los del PP- hace tiempo han abandonado y clamando por una lengua que ellos -los del PP- no gastan más que para ridiculizarla.
Y aquel alud de consignas, de descalificaciones, de amenazas... se ha materializado en la manifestación del 27-N, capitalizada ahora por los sectores más reaccionarios del arco político, que se han constituido en los herederos de UV. Y es ahora cuando ellos -los del PP-, al contemplar perplejos que el tema se les ha escurrido de las manos, vuelan desmarcarse porque, en lugar de ganar votos, perderán a favor de la nueva fuerza política. Todavía les pasa poco -a los del PP- porque tan afectos que son al castellano, han olvidado el dicho aquél de Quien siembra vientos recoge tempestades.