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MÚSICA EN 7D

Antonio Orozco, Chano Domínguez, Steel Pulse y Dwomo, regalos de Navidad

Huele a Navidad y empiezan a sonar las músicas que apelan a ese espíritu de entendimiento, amor y concordia. Eso no quita para que antes también haya lugar para el estruendo, que lo traen Sebastian Bach o The Rasmus; buen jazz, a cargo de Chano Domínguez o Concha Buika; pop madrileño, con Dwomo, y hasta reggae jamaicano por parte de los británicos Steel Pulse. Andy Chango y Antonio Orozco sirven canciones en español.

- Bárbaros del norte. Para que no todo en Navidad suene edulcorado, los finlandeses The Rasmus vuelven con su rock supuestamente endurecido. En los últimos tiempos se han convertido en asiduos visitantes de Madrid, destacando su derroche en la última edición de Festimad. En esa misma convocatoria actuaron los suecos The (Internacional) Noise Conspiracy, aunque su propuesta se acerca más al punki y portan mensajes de radicalismo político. Armed love es el título del disco que ahora viene a mostrar con el estruendo del directo.

Desde Kansas llegan The Belles, un grupo más basado en el pop de guitarras potentes escuela americana; pero la propuesta más extrema que de allí viene podría ser la de Sebastian Bach, que, a pesar de lucir un nombre tan evocador y musical, es el cantante enloquecido de Skid Row, en su proyecto en solitario.

La respuesta española a tanto decibelio vendría por Tres Hombres, Doctor No, Adult Orient Punk, Hora Zulu y La Herejía, que actúa junto a Lubolo Project en beneficio de la ONG Survival, que lucha por los derechos de los pueblos indígenas.

- Del flamenco y del jazz. El pianista gaditano Chano Domínguez aúna con naturalidad los sonidos del jazz y el flamenco, sacando todo el duende a las teclas de su instrumento. Disfrutar de su música durante tres noches seguidas es como un anticipado regalo navideño. El jazz sin adjetivos es al que se entrega durante toda una semana el saxofonista neoyorquino afincado en Madrid Bob Sands. El brasileño Gladston Galliza le pone al jazz el sabor de su país, mientras que la mallorquina de origen ecuatoguineano Concha Buika recrea con enorme personalidad y una voz única grandes clásicos del género y otras composiciones personales.

José Soto, Sorderita, lleva el cante a un club de jazz, el Café Berlín, que desde hace unas semanas se ha metido a organizar su ciclo Los Miércoles Flamencos. Zezo Ribeiro, guitarrista carioca con años en España, también cruza los sonidos de su país con el ritmo y el compás del flamenco. Pero donde se junta lo más ortodoxo de uno y otro género, aunque en jornadas diferentes, es en el ciclo La Voz y el Piano, que concluye ya en el Colegio Mayor San Juan Evangelista: el catalán Miguel Poveda reúne en su garganta lo mejor y más jondo del cante flamenco, mientras que los madrileños Dead Capo acceden al jazz de libro con transgresiones que pasan por mezclarlo con los scratches (distorsiones sobre discos vinilos) y la electrónica.

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- Eternas vanguardias. Los madrileños Dwomo muestran otra forma de entender el pop, así como Telefon Tel Aviv, dúo de Nueva Orleans. Aunque con músicas diferentes, a los dos les une la tendencia de concebir el pop de una forma visionaria, juntándose con la electrónica y otras artes, sin dejar de sonar pop. Dwomo ponen de largo el fabuloso Hijos de un domador, un disco exuberante que rebosa ideas y espléndidas canciones; y Telefon Tel Aviv lo hacen de Map of what is effortless. Procediendo del delta del Misisipí, no podían alejarse del blues y el rythmn and blues tradicionales, pero lo aderezan con soul electrónico, algo de house y hasta trip-hop, más de este siglo.

- Mensajes en canciones. Andy Chango es un iconoclasta que, por su aparente frivolidad, pueda dar que pensar que sus canciones son poco serias. Sin embargo, cada una encierra un mensaje positivo de entendimiento con la vida, aunque hable de drogarse en familia o de madres que se enamoran de mujeres.

Desde el rigor, Antonio Orozco parece más serio, y puede que lo sea, aunque un concierto suyo divierte por la pasión y entrega que él pone y la respuesta asombrosa de su público. El principio del comienzo es su último disco, que vuelve a mostrar en Madrid como fin de fiesta de un concurso organizado por una marca española de whisky para buscar nuevos talentos.

La madrileña Mercedes Ferrer también lleva discurso en sus canciones, y esta semana las canta en la Facultad de Ciencias de la Información, donde se están formando ahora los periodistas del futuro. Si la canción protesta tuvo en los cantautores su mayor referente, hoy en día son los raperos los que le toman el pulso a la reivindicación social. Así, esta semana hay una gran tarde de hip-hop y rap que junta a varias de las estrellas españolas del género. Triple XXX son los cabezas de un cartel revelador.

Los británicos Steel Pulse se miran en Jamaica para disparar sus mensajes reivindicativos y facturar un reggae que tiene ya muchos años de historia. Etiopía era, a su vez, donde se miraban los jamaicanos de culto rastafari y adoradores del reggae, y de allí llega Niway Debebe, un cantante que intenta dar a conocer la música etíope fuera de sus fronteras.

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