Brad Anderson afirma que rodar en España le ha dado libertad

No puede decirse que el rodaje en Barcelona y alrededores de El maquinista fuese saludable. Y no sólo porque se desarrolló en parte en un antiguo hospital para tuberculosos. El protagonista de la película, el actor Christian Bale, se impuso adelgazar 30 kilos para interpretar a su atormentado personaje, y el director estadounidense Brad Anderson sufrió una tendinitis en un pie y se le diagnosticó una hernia discal. Ayer, en el Festival de Cine de Sitges, Anderson presentó su inquietante cinta y se felicitó de la libertad de la que disfrutó en España para rodar. "En Hollywood", reconoció, "jamás hubiera podido hacer este filme".

Brad Anderson, director de películas como Próxima parada, Wonderland o Session 9, explicó que, junto a Scott Kosar, autor del guión, anduvieron buscando durante mucho tiempo financiación para su proyecto -una historia entre el suspense y el thriller psicológico, la de un hombre con un pasado misterioso que, no sabe por qué, lleva un año sin dormir y a quien le suceden cosas muy extrañas-. "El guión estaba tan bien hecho y era tan provocador que a los productores de EE UU les daba miedo", contó el director. Hasta que apareció Filmax en el horizonte. La compañía española decidió correr el riesgo, con la única condición de que el rodaje fuese en España. "Al principio", confesó Anderson, "no lo veía claro, pero ahora debo decir que aceptar fue una excelente decisión. Aquí tuve una libertad creativa total. Nadie intentó ni siquiera influirme para que el resultado fuera más comercial. En Estados Unidos esto no pasa".

La delgadez extrema de Bale -que suena como candidato al Oscar- en El maquinista -cuyo título alude al oficio de su personaje- impresiona al espectador. Anderson asegura que él no dio instrucciones al actor en este sentido. "Antes del rodaje hablamos del personaje de Trevor Reznik, pero jamás comentamos su apariencia física, ni le pedí que perdiera peso. Pero, cuando llegó a Barcelona, nos sobrecogió su aspecto. Su mujer supervisaba su alimentación de acuerdo con un nutricionista, y un doctor le dosificaba el tratamiento médico. Por lo demás, daba la impresión de que Bale estaba disfrutando con esta experiencia".

Anderson admite sentirse cómodo dirigiendo thrillers psicológicos -Session 9 también pertenece al género-. "Me fascina penetrar en las mentes de los personajes", reconoció. Aunque defiende que lo suyo es dirigir cine, del género que sea. "He rodado también comedias románticas, y mi próximo proyecto es un musical, que se sitúa en Brasil, titulado Non stop Brasil". El guión de esta película, con música brasileña, ya está hecho, lo que falta es la financiación, en la que Filmax estudia participar. "Mi gran referente cinematográfico", justificó el director intentando explicar el salto mortal que significa pasar del suspense al musical, "es Kubrick, y él filmó de todo".

El maquinista se estrenó el pasado octubre en Estados Unidos después de un consistente recorrido por prestigiosos festivales, entre ellos el de Berlín y el de Sundance, y Anderson se declara satisfecho por la acogida del filme en su país. El filme se estrena en España el 17 de diciembre con 100 copias.