Altarriba y Albajar vierten en imágenes sus ideas sobre la condición humana

"Se podría decir que la civilización ha consistido en poner el mundo al alcance de la mano", dice el escritor Antonio Altarriba. Dicho y hecho. Junto con la fotógrafa Pilar Albajar, Altarriba ha pergeñado una serie de 12 fotomontajes en los que se juega con distintas posturas de la mano para recrear animales que representan algunas de las virtudes que el ser humano muestra en la civilización, como la altivez o la avaricia. La exposición se presenta en la Casa de Cultura de Vitoria, hasta el próximo 31 de diciembre.

La muestra, titulada Manufacturas, recoge la última serie creada por este tándem casi único en el mundo de la fotografía, en el que Antonio Altarriba ejerce como guionista y Pilar Albajar lleva a cabo las ideas del escritor, desde la puesta en escena hasta el retoque final, en lo que son fotomontajes con un fuerte contenido ideológico y narrativo. Manufacturas, la última serie que ambos han preparado, supone un excelente ejemplo de esta forma de actuar: no hace falta más que ver la imagen reproducida en la portada del catálogo, la titulada El poder, en la que un puño cerrado y contundente adquiere la apariencia de una serpiente que enseña, agresiva, su bífida lengua.

Estas imágenes son, como en las series anteriores (La cámara oculta, Pecados, Errores, Sexo y Miedos) cuidadas elaboraciones creadas con las últimas técnicas fotográficas. Pilar Albajar destacaba el día de la presentación de la muestra todas las virtudes del programa informático Photoshop que ha empleado, por ejemplo, para conseguir que un dedo vertical con la última falange levemente inclinada se convierta en una jirafa que se presenta como La altivez.

Una mano reconvertida en garra de felino se utiliza para recrear La furia, mientras que se ha elegido una mano dispuesta casi para hacer sombras chinescas y recubierta de la piel rayada de las cebras para representar La rapidez. Las imágenes, además de su riguroso trabajo técnico y de suponer una buena muestra de ingenio, reflejan la versatilidad de la mano para construir nuevos imaginarios al combinarse con las referencias a los animales. Así, el hipopótamo sirve para definir la resistencia y el pez, la habilidad, mientras la tortuga simboliza la precaución.

Manufacturas representa, ante todo, una reflexión sobre las condiciones humanas, desde el uso de la fotografía como vehículo para transmitir reflexiones, no como un medio para aprehender el momento. Como dicen los dos autores en su página web (www.albajaraltarriba.com), en la medida en la que sus fotografías "no son ni el producto ni el reflejo de un instante, dejan de ser instantáneas. No dependen de la inestable dimensión de los acontecimientos, sino de esa otra, más difusa, pero más duradera, donde se desarrollan las ideas y arraigan los conceptos".