Rahola y 'Crónicas'
Leí en el artículo del sábado de Pilar Rahola: "En nombre de no se sabe qué elitismo intelectual barato, soez y francamente bajo de techo, se demoniza un programa (Crónicas marcianas) divertido y perspicaz, y se enaltecen algunos muermos antitelevisivos que sólo sirven para hacerse pajas progresistas". El lenguaje de Rahola me recuerda a los que usa la derecha para desacreditar a los progresistas de izquierda, ya sólo le falta gritar "¡muera la inteligencia!" sin con ello negar la posibilidad de que los progres sean criticados, ya que también existe "el discreto encanto de la progresía". El programa que ella defiende, yo, un soez progresista, lo saludé con ilusión cuando empezó ya que, por fin, en la pantalla aparecía una propuesta atrevida, transgresora, con intención de poetizar la mediocre noche televisiva de entonces. Pero el espacio ha ido resbalando hacia lo vulgar, lo fácil y lo más zafio. Se ha llenado de contenidos machistas y la mujer es tratada como un mero objeto sexual y se la ridiculiza. Los gritos, los insultos, las descalificaciones, no el discurso razonado, campan sin cortapisa. Según Rahola, no saber apreciar la diversión y la perspicacia del programa es un signo inequívoco de "bajo techo", por tanto yo soy un muermo, un intelectual elitista barato y soez que se atreve a criticar Crónicas marcianas.
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