Un gran Etosa doblega al campeón

La liga ACB retiró ayer su condición de invicto a uno de los tres equipos que aún la ostentaban, el campeón actual. El Barça dobló la rodilla ante el conjunto revelación, un Etosa Alicante que el año pasado evitó el descenso en el último partido y tras una maravillosa racha que perdura. El equipo de Trifón Poch ha ganado todos sus partidos desde el 27 de marzo. Trece en total, los cinco últimos de la temporada anterior y los ocho primeros de ésta. El Barça pasó ayer por su rodillo.

Con 34 años, Nacho Rodríguez es el faro del Etosa. El Barça le dejó marchar el pasado verano tras un ciclo victorioso de seis años y, lejos de resignarse a una cuesta abajo, el base dirige al Etosa con inteligencia. Ni siquiera Navarro, que le conoce bien, pudo frenarle cuando arrancaba por medio de la zona. El malagueño aprovechó los espacios abiertos por la movilidad de sus pívots, Larry Lewis, Junyent y De Miguel, que sacaron de su lugar a Dueñas, con lo que ello supone. Joan Montes movió el banquillo en busca del antídoto a la férrea defensa del Etosa, que echaba a correr a la mínima ocasión. El partido fue bonito por rápido e igualado, si bien el Etosa se movió siempre una cabeza por encima y terminó por delante todos los cuartos.

El Barça se aferró a los tiros libres provocados por las muchas faltas del Etosa para respirar en el primer tramo. E incluso cobrar alguna mínima ventaja (17-19 y 22-24). Pero fue sólo una apariencia ante sus muchas pérdidas de balón (16 al final). Con su juego de contraaaque el Etosa recuperó el mando del partido. El Barça lo intentó por las bravas, con todas sus torres en la pista y un Fucka resucitado tras su mal comienzo. Pues ni así. Siempre que se acercaba, el Etosa volvía a arrearle. Como cuando Quincy Lewis encadenó tres triples seguidos.

El Etosa arrancó el último cuarto con un parcial que le dejó 17 puntos por encima

(73-56). El vértigo de verse tan alto, la imprecisión en los tiros y la reacción del Barça, acostumbrado a finales del infarto y con Navarro al frente, redujeron la ventaja a seis. Fue entonces el momento de gloria de Nacho Rodríguez (10 puntos, cinco rebotes y cinco asistencias), que templó y anotó para administrar la ventaja. Y para certificar la primera derrota de su ex equipo y la octava victoria de un gran Etosa.