En máximos

Los inversores han decidido apostar por la renta variable en esta coyuntura, a pesar de que la apuesta parece arriesgada por la indefinición del entorno y la volatilidad de los mercados.

El precio del petróleo se ha mantenido tranquilo un día más y, aunque no había noticias en las que apoyar esa decisión, el dinero ha seguido acudiendo al mercado en busca de oportunidades de cara al tramo final de este ejercicio.

En el caso del mercado español, el cambio en la presidencia en Repsol YPF ha desatado la imaginación de los inversores que ya ven carambolas por todas partes en el sector energético, lo que ha dado paso a todo tipo de rumores, pero el resultado de la sesión no ha sido muy diferente al del resto de los mercados europeos.

El Ibex 35 termina con una subida del 1,16%, con 8.435,40 puntos, que le dejan a menos de nueve puntos de los máximos de mediados de marzo, mientras que el índice general de la Bolsa de Madrid, con mayor presencia de valores medianos, ganó el 1,10% y se sitúa en el nivel más alto desde junio de 2001. Este índice acumula una ganancia anual del 10,22%, mientras que la del Ibex 35 es del 9,02%.

Este tirón de las cotizaciones está contando con una presencia importante de dinero que ha hecho subir la contratación en el Mercado Continuo hasta 3.721,16 millones de euros, de los que algo menos de 900 millones procedieron de las operaciones institucionales.

Los avances de los mercados europeos fueron similares, con el 1,18% en París y el 0,78% en Francfort. La Bolsa de Londres subió el 0,27%.

Estas subidas coincidieron con otra jornada insulsa en la Bolsa de Nueva York en la que las retiradas de beneficios, tras dos sesiones consecutivas de fuertes alzas, coincidían con otro indicador negativo, el de las peticiones semanales de subsidio de desempleo, que crecieron por encima de las estimaciones de los analistas. El índice Dow Jones de valores industriales subía el 0,13% a media sesión, lo que le permitía mantener el nivel de los 10.000 puntos.