"Hasta que el cuerpo aguante"

Paco Seirul.lo, preparador físico del Barça, sostiene que no hay nada más importante para el buen rendimiento físico de un atleta que su voluntad para conseguir los objetivos. Y si el ejercicio de voluntarismo está acompañado por los resultados, una plantilla profesional es capaz de afrontar el calendario más exigente, aunque sus recursos vayan menguando. "Ése es el problema", admite el jefe de los servicios médicos del club, Jordi Ardevol. "Jugar tres partidos en siete dias es una exigencia para la que estamos preparados; lo complicado es hacerlo con tantas lesiones".

"Por el momento no hemos acusado el cansancio", concluye Xavi. "Acabamos bien los partidos. Nos sentimos fuertes". El volante y el portero Victor Valdés son los jugadores que han disputado todos los minutos de la Liga y ninguno se siente cansado. "En el campo se nota que estamos trabajando bien", asegura el guardameta. Y Ardévol reseña: "El equipo sigue un plan de entrenamientos preparado a conciencia". Seirul.lo se remite a la profesionalidad de los jugadores, que siguen además un plan de alimentación marcador por el club, para justificar el rendimiento: "Hay que estar bien preparados y cuidarse mucho. Ese es el secreto para que un futbolista aguante un ritmo de competición tan alto". Cada ejercicio, en cualquier caso, está pensado para inicidir en el buen rendimiento físico.

El plan establecido sigue unas pautas muy concretas. Durante la semana se incide en el trabajo de fuerza, a base de ejercicios de multisaltos, sesiones en el gimnasio y partidos en espacios reducidos de dos contra tres, muy explosivos. La resistencia, trabajada durante la pretemporada, se mantiene a base de incorporar los partidos como parte del plan de preparación. "A efectos prácticos", reconoce Albert Roca, que cuida de la preparación con Seirul.lo, "usamos los noventa minutos de partido como parte del plan semanal de trabajo". Si se hiciera de otra manera, si el volumen de resistencia que adquiere un jugador durante el esfuerzo de noventa minutos se incrementara con trabajo especifico durante la semana, sufrirían los efectos del sobreentreenamiento. Estarían fundidos. Tampoco hay tiempo: entre partido y partido en una semana como la presente, el plan es sencillo: el lunes toca recuperación; el martes, trabajo técnico con indicencia en la fuerza; el miércoles, partido -es decir, resistencia-; el jueves, recuperación; el viernes, técnica y fuerza; el sábado, resistencia, y vuelta a empezar.

Aunque Ardévol reconoce que es difícil evaluar la capacidad de resistencia de un futbolista porque depende de factores tan variables como su posición en el campo, coincide con los prepadores físicos en que el jugador "se cansa más cuando pierde que cuando gana" y también en que la única diferencia respecto a otras temporadas son la lesiones. "Tenemos a tres jugadores operados de rodilla, cosa poco común". "Normalmente, cinco jugadores suelen ser fijos. Este año, doce futbolistas soportan el 90% de la competición", recuerda Unzue. En previsión de un bajón físico en enero, los técnicos sopesan la posibilidad de celebrar un ministage invernal. "Está por decidir, pero es probable que carguemos pilas con un trabajo específico", admite Roca, a expensas de la decisión de Rijkaard. Los jugadores aguardan tranquilos. "En Brasil jugaba 80 partidos por temporada. Yo disfruto", responde Ronaldinho. "Hasta que aguante; cuantos más partidos juegue, mejor".