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Crónica:FÚTBOL | Copa del Rey: treintaidosavos de final (a partido único)
Crónica
Texto informativo con interpretación

Owen sigue afinado

Un tanto del inglés y otro de Morientes permiten al Madrid superar al Leganés

Diego Torres

No hay situación crítica que no pueda aliviar un delantero caliente. Owen marcó contra el Dinamo un gol clave para sostener al Madrid en la Liga de Campeones. Luego marcó otro, ante el Valencia,fundamental para los intereses madridistas en la Liga. Y ayer, en su tercer partido en ocho días, marcó su tercer gol, indispensable para que el Madrid no abandonara la Copa en la primera noche de competición. Owen se consolida. Marca en el Bernabéu a pase de Raúl y marca en Butarque a pase de Morientes. Lo hace bajo las luces del gran espectáculo y bajo una fría noche al sur de Madrid. Esta fue la noche de ayer, un compromiso deslucido que requería eficacia y ahorro de energía en un estadio que el año pasado había sido poco hospitalario con los madridistas. Esta vez los aprietos no se repitieron.

LEGANÉS 1, REAL MADRID 2

Leganés: Vera; Pardo, Txurri, Albarran, Iban Pérez; Melgar, Municio; Ruiz (Dani, m. 77), Borja, Alvaro (Jardín, m. 68); y Marcos.

Real Madrid: César; Mejía, Pavón, Samuel (Paredes, m. 46), Raúl Bravo; Javi García, Borja, Celades, Alex Pérez (Juanfran, m. 52); Owen y Morientes.

Goles: 0-1. M. 19. Álex Pérez cabecea hacia atrás un saque de banda, Owen remata a bocajarro, Vera para, y el rechace es aprovechado por Morientes. 0-2. M. 49. Owen remata un centro de Morientes. 1-2. M. 56. Dani Ruiz, de falta directa.

Árbitro: González Vázquez. Amonestó a Borja, Bravo, Paredes, Txurri, Marcos y Pardo.

Unos 5.000 espectadores en Butarque.

Más información
Los centrales del Madrid, en la enfermería

La Copa es una competición maldita para la actual directiva del Madrid. Florentino Pérez y sus técnicos ven en este torneo un lastre, un compromiso con más posibilidades de convertirse en una trampa que en fuente de éxito. No le faltan antecedentes justificativos al presidente. Por tanto, cuanto menos jugadores titulares se expongan en Copa, mejor para los intereses de la directiva. Así se lo ha hecho llegar a García Remón. Ayer, el entrenador respondió satisfactoriamente. De los titulares habituales sólo alineó a Samuel y a Owen, dos futbolistas que estuvieron lejos de la acción durante muchos partidos.

Con Samuel y Owen apuntalando al equipo arriba y atrás, el Madrid salió a Butarque con viento a favor. Tirándose a las bandas y volviendo a entrar, Owen fue una máquina de dejar en evidencia a los centrales del Leganés. Le ayudaron las combinaciones con Morientes y, sobre todo, la capacidad de Álex Pérez para encontrar a los puntas con movimientos sencillos desde el medio y la banda izquierda. En la zaga, a Samuel no le fue peor que a su colega inglés. Igual que el delantero, el central fue sobrado de categoría. Parecía que jugaba contra sus hijos. Ganó siempre y cuando García Remón le sustituyó, en el descanso, se marchó sin haber cometido una falta. Samuel hizo un partido impecable, pero se fue lesionado y es posible que sea baja el próximo sábado ante el Getafe.

Sin Samuel disponible, García Remón dio entrada a Paredes para cubrir el lateral izquierdo y trasladó a Bravo al centro de la defensa. El técnico quiso con este intercambio aliviar los padecimientos de su jugador. En la banda, Bravo fue el único defensa del Madrid que se vio realmente exigido por las circunstancias. Por lo demás, el Madrid formó un equipo bastante bien acoplado teniendo en cuenta las dificultades de generar mecanismos con tres días de entrenamientos. Los dos jugadores del B que salieron de entrada, Álex Pérez y Javi García, contribuyeron a la empresa de manera indispensable. Se movieron entre líneas como si llevasen años asociándose a sus compañeros. En una de las primeras jugadas del partido, Pérez alcanzó el balcón del área y dejó solo a Owen en el segundo palo. El inglés remató alto. Minutos más tarde, Pérez volvió a intervenir: peinó un balón hen un saque de banda y Owen, en el área chica, remató al muñeco. Pero Vera no blocó la pelota y Morientes abrió el marcador.

La salida de Pérez y Samuel en el segundo tiempo restó contundencia al Madrid, que hasta el momento sólo se había visto importunado por la insistencia de Borja. El diez del Leganés lo intentó todo, hasta un regate de espaldas a Samuel como el que hizo Ronaldinho el domingo en el Camp Nou. Luego llegaría el tanto de Dani Ruiz, un golazo de falta directa que hubiera firmado Beckham, y que no hizo sino maquillar el resultado sin mayores consecuencias.

Morientes celebra su gol.
Morientes celebra su gol.REUTERS

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Sobre la firma

Diego Torres
Es licenciado en Derecho, máster en Periodismo por la UAM, especializado en información de Deportes desde que comenzó a trabajar para El País en el verano de 1997. Ha cubierto cinco Juegos Olímpicos, cinco Mundiales de Fútbol y seis Eurocopas.

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