Málaga redescubre al poeta José María Hinojosa, el gran desconocido del 27
Un congreso celebra el centenario de uno de los introductores del surrealismo en España
Nacido en una familia de terratenientes y criado entre costumbres burguesas, el poeta José María Hinojosa (Campillos, Málaga, 1904) es uno de los grandes desconocidos de la Generación del 27, debido, quizás a su evolución ideológica. Precursor del surrealismo en España, comenzó a relacionarse con la intelectualidad en la Residencia de Estudiantes de Madrid y en París, donde bebió de las vanguardias internacionales. El Centro Cultural de la Generación del 27 celebra esta semana un congreso, dentro del que hay programados recitales de poesía, una exposición y presentaciones de libros, para celebrar el centenario de su nacimiento y dar a conocer su obra.
La infancia de Hinojosa transcurre entre Campillos y Alameda, poblaciones de Málaga, donde su familia tenía una casa con una huerta, una fuente y un palomar. Allí se familiarizó con la naturaleza, las labores del campo y escuchó las leyendas de la zona. Uno de sus primeros textos, El reloj, está inspirado en un personaje de Alameda, el padre Cristóbal.
Entre dos luces, la muestra que le rinde homenaje y que se inauguró ayer en el Centro Cultural Provincial de Málaga, "pretende mostrar una imagen más real y romper con la distorsión, los errores, y los tópicos sobre Hinojosa", explica su comisaria, Mati Moreno. En 1921 comenzó a estudiar derecho en la Universidad de Granada y conoció a Federico García Lorca, con el que coincidió en la tertulia granadina del Rinconcillo. Dos años después fundó la revista Ambos, junto a Manuel Altolaguirre y José María Souvirón, publicación precursora de Litoral, que contó con la colaboración de Emilio Prados.
La exposición, que reúne unos 300 documentos, muchos inéditos, pone sobre la mesa las contradicciones de su vida. En 1931 publica La sangre en libertad, su último libro. A partir de entonces inicia una carrera política con el Partido Agrario Español y se presenta a las elecciones de 1936 con la Confereración Española de Derechas Autónomas (CEDA)."Se entregó a la literatura con un compromiso sincero y no sólo como un pasatiempo o una veleidad de un millonario", resume la comisaria. El poeta, comprobó como otros autores le ridiculizaban cuando publicó sus primeras obras surrealistas.
El eje central de las actividades es el congreso, que comenzó ayer y termina el viernes. En él intervienen numerosos especialistas en la vida y obra del poeta. La primera jornada estuvo dedicada a la época en la que vivió y su influencia en la generación. Hoy las conferencias estarán centradas en su obra, a través de su último poemario La sangre en libertad, y la mitología surrealista. El libro posee mucho de los rasgos del movimiento, como el rechazo al racionalismo y al realismo, metamorfosis del yo poético, imágenes oníricas o desproporción en las figuras.
En la tercera sesión los ponentes abordarán las relaciones con otros autores como Vicente Alexaindre o Luis Cernuda. Las conferencias terminarán con un repaso a los últimos días de la vida del poeta.
El gobierno republicano le detuvo en julio de 1936, junto a su hermano Francisco y su padre. Una partida de anarquistas radicales le fusilaron el 22 de agosto. Desde esta fecha hasta 1974, año en el que se editaron sus obras completas, ha permanecido prácticamente olvidado. Nadie reclamó su figura quizás porque era un autor incómodo tanto para los conservadores, como para sus compañeros de generación. "No interesaba a la derecha por su obra ni al izquierda por su trayectoria política final", explica Moreno, "El resto de los escritores, en cierto modo, lo consideraron un traidor".
Durante estos días, su provincia redescubre a un poeta que compartió inquietudes artísticas con Salvador Dalí y se desenvolvió en una sociedad en la que eran frecuentes las fiestas y reuniones en el Hotel Caleta Palace o la práctica de deportes y los viajes.
Los fondos de la muestra se complementan con la proyección de las filmaciones en las que Anna Frëuller, la mujer con la que pensaba casarse en 1937, reflejaba las diversiones de la feliz burguesía de los años 20 y 30, como la aviación, el patinaje o el tenis. Además de fotografías, y paneles explicativos, la exposición cuenta con primeras ediciones de sus obras, manuscritos, y cartas con peticiones de libros surrealistas.
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