Faltas que serán delitos a partir de enero

"El acusado José Andrés R.S. zarandeó y dio puñetazos por todo el cuerpo a su mujer y enseñándole una navaja cerrada le dijo: 'ves esto, no me jodas que un día te corto el cuello". Fue agredida al menos en dos ocasiones más, según consta en la sentencia que se ha resuelto un caso que se produjo en mayo de 2003 en Valencia.

La sección tercera de la Audiencia de Valencia ha confirmado una pena que a partir del próximo 1 de enero, fecha prevista de entrada en vigor de la Ley Integral contra la Violencia Doméstica una vez superado el trámite en el senado, sería muy superior. El autor de los hechos ha sido condenado a seis meses de prisión, que no cumple, por un delito de malos tratos habituales en el ámbito familiar. Además, la sentencia confirmada fija una pena de 15 días por una falta de amenazas con cuota diaria de 8 euros y como autor de una falta de coacciones a la pena de otros 15 días por idéntica cantidad. La víctima recibirá 50 euros de indemnización por las lesiones. Y el condenado tiene prohibida cualquier comunicación con ella, lo que es equivalente a una orden de alejamiento.

La nueva norma pretende que no sean levemente castigados episodios que hasta ahora han sido calificados como faltas, se entiende en este caso las de coacciones y amenazas, sino que tendrán la consideración de delito, lo que supondrá la imposición de un castigo mayor.

La Ley Integral de Violencia Doméstica hubiera, además, acelerado los trámites para que los hechos hubieran tenido una respuesta más rápida. Los hechos denunciados ocurrieron el 17 de mayo de 2003. La sentencia del juzgado de Lo Penal número dos de Valencia tiene fecha del 6 de julio pasado, más de un año después, porque la denuncia se produjo escasos doce días antes de la entrada en vigor de los juicios rápidos, que hubieran permitido resolver en primera instancia en menos de 15 días el contencioso.

La sentencia inicial recogía que meses después de las agresiones denunciadas, José Andrés S. S., que presentó recurso por supuesta vulneración de la presunción de inocencia, impidió la entrada al domicilio de su mujer y que al menos en dos ocasiones más la agredió cogiéndola del cuello, aunque no constan lesiones".