Órdago contra Bodiroga

La Supercopa, el torneo que ha abierto el curso del baloncesto español, ha arrojado luz sobre la Liga ACB, que empieza hoy. El efecto optimista que llevan emparejados los fichajes y las reconversiones de lujo del Real Madrid, el Unicaja y el Pamesa quedó un punto rebajado ante el poderío que exhibió el Barcelona, abanderado como casi siempre por Bodiroga. Se vaticinaba una recesión en un equipo que ha perdido a jugadores importantes en los dos últimos años -Jasikevicius, Femerling, Varjeao, Nacho Rodríguez...- y que apenas se ha reforzado. A pesar de ello y de la crisis de tres semanas atrás por su repentino cambio de organigrama y entrenador al nombrar director general a un triunfador nato en el balonmano, Valero Rivera, y relevar a Svetislav Pesic por Joan Montes, el Barça envió un mensaje en Málaga venciendo al Unicaja y al Madrid: continúa con el conjunto más experto, capaz de resolver ante las máximas exigencias.

Precisamente, eso es lo que le falta al Madrid, como quedó demostrado en la final de la Copa ULEB de la temporada pasada y en la propia Supercopa. Ahora, bajo la dirección de Bozidar Maljkovic, uno de los más respetados entrenadores; con una línea exterior impresionante en la que ha reunido a Bullock y Sonko con Bennett y Herreros, y tras haber ganado la puja por Felipe Reyes, el Madrid avizora el final del túnel. Pero no lo tendrá fácil. El Unicaja se ha reforzado bien. Con Garbajosa, que regresa en plan jugador franquicia tras su exitoso paso por Italia con el Benetton de Treviso; Bremer, un escolta procedente de los Warriors de Golden State; Pietrus, un ala-pívot internacional francés, y tres de los más destacados de la última Liga: Tabak (DKV), Pepe Sánchez (Alicante) y Vázquez (Auna Gran Canaria), el equipo malagueño parece en disposición de lograr su primer título tanto en la Liga como en la Copa. Además, cuadros tan consolidados como el Tau y el Pamesa, este último con Pablo Laso de entrenador y fichajes como los de Rakocevic (Estrella Roja), Okulaja (Girona), Yebra (Fórum) y Archibald (Toronto Raptors), se mantienen en el quinteto de los grandes.

Pese a sus dificultades económicas y las peripecias para vender su producto a las televisiones al precio que cree justo, la Liga ACB sigue repleta de excelentes equipos y jugadores. El espectáculo promete.