El Ayuntamiento quiere adjudicar este año la obra del nuevo tranvía de Sevilla

El Ayuntamiento pretende adjudicar antes de final de año las obras del nuevo tranvía de Sevilla, un medio de transporte complementario al metro y que discurrirá en superficie por el centro de la ciudad, desde el Prado de San Sebastián a la Puerta Osario, pasando por Plaza Nueva, Campana y Encarnación. La inversión prevista es de 43,3 millones, para lo que se espera contar con el apoyo de la Junta de Andalucía. Si se cumplen los planes municipales, esta línea estaría operativa en tres años.

El Ayuntamiento quiere gestionar de forma directa el tranvía, a través de la Empresa Municipal de Transportes, Tussam, en colaboración con Ferrocarriles Andaluces. La intención es facilitar el acceso al casco histórico de la capital, una demanda de los comerciantes que no resuelve en su totalidad el trazado de la línea 1 del metro.

El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, quiso dejar claro el sábado, durante la presentación oficial de este proyecto, que el tranvía no tiene nada que ver con el metro, salvo en lo que supone de transporte público complementario, y no modificará los trazados actuales previstos.

Los planes municipales de financiación prevén que la Junta de Andalucía, según dijo Monteseirín, "corra con los gastos" de infraestructura, mientras que el Consistorio se encargará de la gestión del proyecto así como del gasto en material móvil.

Recorrido

El tranvía unirá el Prado de San Sebastián y la Puerta Osario, por San Fernando, Constitución, O'Donnell, Velázquez, Campana, Laraña, Encarnación, San Pedro y Ponce de León. El tramo de la calle Méndez Núñez supondrá la peatonalización total de la vía, a la que sólo podrán acceder en vehículos los residentes y los servicios de emergencias. El mismo plan se aplicará en la calle O'Donnell.

El tranvía recorrerá 2,8 kilómetros por la superficie del centro histórico de la capital hispalense y la velocidad media de los vehículos será de unos 30 kilómetros por hora. Podrá alcanzar hasta 50 kilómetros por hora en los tramos de la avenida Carlos V y San Fernando. En el resto del trazado, el tranvía irá a su velocidad media y reducirá hasta los 12 kilómetros por hora en las vías peatonales para adecuar la velocidad al tránsito de las personas.

Las conducciones para la infraestructura de comunicación y señalización del tranvía serán subterráneas. Las catenarias para la alimentación eléctrica de la maquinaria serán móviles, con el fin de poder retirarlas para la celebración de procesiones y otros actos, y se intentará reducir al máximo el impacto visual.

La línea prevista en principio precisará de seis vehículos más uno de reserva, cuya longitud variará entre los 22 y 30 metros. El ancho de los mismos no superará los 2,65 metros.