Time Warner abandona la puja por los estudios MGM y deja vía libre a Sony

Time Warner anunció ayer que se retiraba de la puja por los estudios cinamatográficos Metro Goldwyn Mayer (MGM) y su valiosa filmoteca, por lo que la compañía japonesa Sony se queda como única contendiente en la batalla. Sony, junto a un grupo de inversores, puso sobre la mesa en torno a 5.000 millones de dólares (4.078 millones de euros) para marginar a su rival y terminar de convencer al principal accionista de MGM, el magnate Kirk Kerkorian.

El abandono de Time Warner en la puja no implica que la venta de MGM esté cerrada definitivamente a favor de Sony, aunque ayer se daba por adjudicada. Al cierre de esta edición las compañías seguían discutiendo los términos de la transacción y la mayoría de los analistas en Wall Street anticipaban que la decisión final era "una cuestión de días".

Sony ofrece ahora 12 dólares por cada título de MGM, con lo que mejora su oferta inicial en 300 millones de dólares. La oferta incluye la asunción de 2.000 millones de deuda. La novedad es que en el consorcio liderado por Sony entraría también la operadora de cable Comcast, que podría sumarse a la operación aportando 300 millones de dólares, una vez que el acuerdo con MGM esté concluido.

El grueso del desembolso correrá a cargo de Providence Equity, con 450 millones, según adelantaron fuentes metidas en la negociación. En la operación de MGM están también Credit Suisse Firts Boston y JP Morgan Chase. Sony lleva meses mostrando gran interés por comprar los 4.000 títulos que compone su filmoteca. Pero MGM siempre dejó claro que la venta se aplicaba al conjunto de la compañía.

El presidente ejecutivo de Time Warner, Dick Parson, explicó que la vía de las adquisiciones sigue abierta, aunque señaló que su estrategia se ajusta a una "disciplina presupuestaria muy estricta" y a un "uso prudente" de su capacidad financiera. Para Parson, los 5.000 millones en los que se está valorando MGM es un valor muy alto.