Un tranvía subterráneo unirá el Pinar de Chamartín con los nuevos barrios del norte

La región contará en la primera mitad de 2007 con un tranvía subterráneo. Ésta es la fórmula adoptada por la Consejería de Transportes para unir el Pinar de Chamartín con la colonia de la Virgen del Cortijo y dos de los nuevos barrios del norte, Sanchinarro y Las Tablas. A partir de ahí, la línea conectará con el futuro Metronorte, que unirá la capital con los municipios de San Sebastián de los Reyes y Alcobendas. Los vehículos de esta línea de tranvía serán iguales a los utilizados en el Metro-oeste. Un 30% de sus 5,3 kilómetros discurrirá en superficie; el resto, bajo tierra.

La Consejería de Transportes de la Comunidad ha optado en la zona norte por el metro ligero o tranvía porque, según un portavoz, "es un sistema más ágil y flexible en muchos aspectos técnicos". "En primer lugar, permite dibujar en el trazado curvas con un ángulo más cerrado, que son imposibles en el metro convencional. Además, con él es más sencillo aumentar o reducir el número de vagones por convoy para adaptarse rápidamente a la demanda variable de viajeros según los días o las horas de servicio", añade este portavoz. Esta línea de tranvía se caracterizará por discurrir bajo tierra en la mayor parte de su trazado; sus convoyes serán más ligeros que los trenes de metro y correrán menos.

El sistema de gestión será el mismo que el del Metro-oeste a Boadilla del Monte y Pozuelo de Alarcón: el Gobierno regional saca a concurso la construcción de las vías y compra los vagones; más adelante sacará a concurso su explotación para que varias empresas compitan por el contrato.

El concurso de construcción del metro ligero de los nuevos barrios ya ha salido a licitación pública, tiene un presupuesto de 142,1 millones de euros y el Gobierno regional espera adjudicarlo antes de final de año. Las obras durarán dos años y terminarán a principios de 2007; la presidenta regional, Esperanza Aguirre, podrá inaugurarlas poco antes de las elecciones de mayo de 2007.

Maratón de inauguraciones

A Aguirre le espera un auténtico maratón de inauguraciones en los últimos meses de su mandato. Sólo en metro, podrá inaugurar a pocas semanas de las elecciones autonómicas las prolongaciones de las líneas 1 y 4 hasta Pinar de Chamartín; la 1 al Ensanche de Vallecas; la 11 a Carabanchel; la línea 5 hasta la Alameda de Osuna; la 3 a Villaverde Alto; el Metronorte hasta Alcobendas y San Sebastián de los Reyes; el Metroeste hasta Coslada y San Fernando de Henares, el metro ligero a Pozuelo de Alarcón y Boadilla del Monte y el tranvía a los nuevos barrios, además de otras cuatro nuevas estaciones en otras líneas.

Una docena de inauguraciones a las que podrá sumar las de los ocho hospitales que también serán construidos durante esta legislatura. Todos estos proyectos, con una inversión que alcanzará los 1.500 millones de euros, han sido diseñadas para ser inaugurados en la primera mitad de 2007.

El metro ligero a los nuevos barrios tendrá su punto de origen en el gran intercambiador que Transportes construirá en Pinar de Chamartín, punto en el que confluirán las prolongaciones de las líneas 1 y 4.

Desde este punto, el trazado transcurre bajo la superficie de la calle de Arturo Soria y cruza bajo el enlace de la M-30 con la M-40, a poca distancia de la que será la segunda parada del recorrido, en la confluencia de Arturo Soria con la avenida de Manuel Azaña y el camino de Fuente de la Mora. Frente a la sede del Boletín Oficial del Estado (BOE) estará situada la tercera estación, en concreto en la avenida de Manoteras.

En este punto, el trazado virará hacia el este bajo la calle del Príncipe Carlos, en Sanchinarro, barrio donde se abrirán tres estaciones a lo largo de una extensa curva (ver gráfico): en la confluencia con la calle del Pintor Antonio Saura la primera; la segunda en la esquina con la calle del Alcalde Pedondo Aceña; y la tercera en el tramo de Príncipe Carlos, entre Américo Castro y Vicente Blasco Ibáñez. El tranvía recorrerá en superficie el tramo comprendido entre la primera y la segunda de estas estaciones, tras lo cual volverá a circular por el subsuelo.

Sanchinarro contará con dos paradas más: una en la esquina de las calles de María Tudor y Margarita de Parma; y la otra en una glorieta en la que confluyen tres calles: Ana de Austria, María de Portugal y la avenida de Niceto Alcalá Zamora. A partir de este punto, la línea toma dirección noroeste. La penúltima parada de la nueva línea estará ya en Las Tablas, en el tramo de la calle de Palas del Rey comprendido entre Valcarlos y Furelos. La última estación será la conexión de este metro ligero con el Metronorte en su trayecto hasta Alcobendas y San Sebastián.

El segundo tramo en superficie del metro ligero serán los 750 metros que separan a las dos últimas paradas. En total, los dos tramos en superficie suponen algo más de un kilómetro y medio, un 30% del total de 5.300 metros de la nueva línea.